Un 'contrato' muy sui géneris

Jasmin Repesa es un entrenador muy peculiar. En el baloncesto actual, en el que cada paso se da con un contrato bajo un brazo y con una copia del mismo pertinentemente sellada bajo el otro, a él le bastó un simple apretón de manos para hacerse cargo de la selección croata en el Preeuropeo de Eslovenia. Ni su posterior compromiso con el Unicaja, un equipo de Euroliga y en su primera experiencia en la ACB, le hizo romper de ese acuerdo verbal con la Federación de su país de adopción.

Y dentro de esa buena relación que Repesa mantiene con los federativos se discutió hace ya unos meses sobre la posibilidad de acortar los plazos de estancia en el banquillo de su país. Se habló de clasificar a Croacia para la cita de Eslovenia en 2013 y, una vez confirmado el éxito, poder viajar a Málaga. Y más tarde se subió el nivel de exigencia. La Federación le pidió que convirtiera a Croacia en la gran campeona del Grupo C.

Repesa ya ha cumplido la mitad del trato. Vapuleó el domingo a Chipre (49-98) y selló su billete para el Europeo de Eslovenia del próximo verano. Y ahora le falta poner la guinda del pastel y ser campeón matemático, algo que conseguirá mañana mismo si derrota en casa a Ucrania. Ambos están ya clasificados, y suman cinco triunfos, pero mientras Croacia está invicta, Ucrania encajó una derrota, precisamente contra la selección balcánica (79-80, tras una prórroga). Así que si la selección que adiestra Repesa vence mañana se habrá proclamado campeona del Grupo C, a falta de dos jornadas, ante Hungría (sábado día 8) y Austria (martes día 11).

La Federación tiene el compromiso de liberar a Repesa si Croacia vuelve a vencer a Ucrania, por lo que el coach podría adelantar su llegada a Málaga una semana y estar en la Costa del Sol este mismo jueves o el viernes, en vez del miércoles-jueves de la próxima semana. Así, podría dirigir al equipo para la final de la Copa de Andalucía ante el Cajasol, este domingo en Córdoba, a partir de las 12.00 horas y televisado en directo por Canal Sur 2.