Un día de concentración diferente. El Unicaja está inmerso en las semifinales de la ACB y eso se nota. Por eso, Joan Plaza, y dado que el equipo va a estar cuatro días concentrado, decidió darle una tregua al equipo. Tras desayunar y continuar con el trabajo, ya que la plantilla vio un vídeo del partido, los jugadores tuvieron el mediodía y parte de la tarde libre.

Tuvieron libertad para marcharse por Madrid a comer. De forma individual o en grupo, la plantilla pudo disfrutar de un par de horas de sosiego y hasta de turismo. Zoki Dragic cogió un taxi al Centro de Madrid para comer y dar un paseo. Earl Calloway, por ejemplo, prefirió ir a comer al Foster Hollywood. Una mañana diferente antes de ir por la tarde a entrenar.

Los jugadores llegaron al Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid a las 18.45 horas. Lo hicieron ayer en autobús. El trayecto entre el hotel de concentración y el pabellón es de sólo cinco minutos a pie. Por eso, el viernes por la mañana, en la sesión de tiro, la expedición se fue dando un paseo. Ayer ya el equipo se desplazó en autobús y a las 19.00 ya estaban haciendo tiro en la pista de juego.

El cuadro verde tiene cosas que corregir tras su gran partido del viernes y Plaza diseñó una sesión con escasa carga física y haciendo hincapié en los errores cometidos. El técnico tiene a todos sus jugadores disponibles, salvo el esloveno Dragic. El jugador ha viajado con el equipo, aunque no puede jugar tras ser operado. Los demás están bien para el encuentro.

Hasta cuatro jugadores tuvieron que pasar el control antidoping. Los médicos de la Federación pidieron muestras de orina a Ryan Toolson, Txemi Urtasun, Carlos Suárez y Domas Sabonis. Gajes del oficio. Todos fueron antes de la sesión y Sabonis, tras el entreno.

A Madrid han venido familiares y amigos de los jugadores, también algunos trabajadores de las oficinas de Los Guindos. Todos quieren apoyar al equipo y transmitirle su aliento ante el Real Madrid.