Joan Plaza hizo repaso a la actualidad del Unicaja en el programa Play Basket de la Cadena Ser. El técnico cajista habló de la derrota ante el Barça, de la actuación arbitral y de la decisión de la Euroliga de no contar con los verdes para su futuro proyecto.

Sobre el partido ante los culés, fue contundente. «No tengo explicación a la mala primera parte del equipo. No hubo un tema de cansancio, que a veces revolotea por la cabeza de un entrenador. Es muy difícil entender qué nos pasó en esos dos primeros cuartos. Fueron demenciales, no tiene otro nombre. Si el equipo premeditadamente lleva mala dinámica, ha entrenado mal o hay mala actitud pues lo entiendes, pero no era éste el caso. Por lo que sea -no somos máquinas, somos personas- llegábamos un segundo más tarde que ellos. No podía hacer nada. Pedir tiempos muertos o sacar un Winchester, que no tenía a mano. En el descanso intentamos activar otras cosas, hicimos una reflexión profunda, no nos rendimos, nos comprometimos. Nosotros competimos siempre y eso es lo que hicimos en la segunda parte hasta el punto de rozar la machada», dijo.

Sobre la actuación arbitral fue menos incisivo que en la rueda de prensa post partido. «Siempre he dicho que no podría ser árbitro... y con eso ya lo digo todo. No tengo la paciencia ni el grado de tolerancia ni quizá el talento y la habilidad que tienen ellos. Entiendo que hay errores, rara vez el comité arbitral encontrará una queja arbitral mía. Hicimos un gran esfuerzo. Somos el segundo equipo que menos faltas de Europa hace, soy un entrenador que sanciona cualquier simulación teatrera de jugadores propios. Eso lo odio. Nosotros jugamos con esa honestidad. Cuando jugamos contra equipos que hacen esas cosas -simulaciones, agarran en los bloqueos juegan por fuera de la pista...- y ganan, con la permisividad de quienes tienen que juzgarlo, pues pienso que soy un romántico y eso me entristece. Pero aquí acaba esto, a animar y a mirar hacia adelante. Y confiar que si hubo algún error, que no vuelva a suceder. Yo soy el que comete más errores y lo asumo», explicó.

Sobre la situación con la Euroliga, Joan Plaza no fue muy optimista. «He visto a gente del club muy importante llorar por la decisión de no incluir al Unicaja en la Euroliga. Un equipo que hace dos años quedó noveno, el año pasado décimo, que lleva 11 años consecutivos en el Top 16, que tiene el sponsor más longevo de la competición, que paga cada mes, una afición fiel... Es normal que personas muy importantes lloraran de rabia e impotencia por perder jugar la Euroliga. La mayoría de directores técnicos de la Euroliga declararon en una encuesta que Málaga era una de las mejores plazas para jugar», argumentó.

Plaza ya piensa en el partido del viernes ante el todopoderoso CSKA. «Sólo han perdido contra nosotros e intentarán borrarnos del mapa. Intentaremos hacer valer nuestra capacidad. Intentemos darlo todo. Quizá será la última vez en la historia que se juegue ante el CSKA y ser primeros. Aunque no sirva para nada, sería un honor».