El Universidad Católica de Murcia, con un gran juego colectivo, arrolló al Montakit Fuenlabrada en un partido que dominó de principio a fin, para acabar ganando por 24 tantos (99-75) a un rival en el que el croata Marko Popovic, autor de 33 puntos y la misma valoración -a la que llegó con un extraordinario 14 de 14 en tiros libres-, estuvo demasiado solo. Los fuenlabreños se jugaban muchas de sus opciones coperas, pero nunca dieron la sensación de poder asaltar la pista del UCAM.