El Unicaja regresa hoy a los entrenamientos tras un día de descanso, ya que no hay tiempo que perder, con una doble cita esta semana, en Euroliga y en Liga Endesa. Los malagueños realizan el último desplazamiento en la máxima competición continental, y también el más largo, hasta la ciudad rusa de Krasnodar. Allí jugará el jueves a las 17.00 horas. Y el domingo, nueva cita en el Martín Carpena, también a las 19.30 horas, y ante el FIATC Joventut. Por cierto, que el equipo catalán cayó anoche, en el último encuentro de esta jornada, en su propia pista y ante el Manresa (63-76).
Los malagueños vuelven hoy al trabajo con la dulce resaca provocada por un final de partido ante el Bilbao Basket de auténtica película. Los verdes remontaron 10 puntos en cinco minutos, en una exhibición portentosa en defensa (Alberto Día estuvo genial atrás) y de acierto, con triples del propio Alberto, dos de Kenny Hayes y sendos mates de Nedovic que remataron al equipo vasco. Unos minutos de locura, sin sistemas, de unos contra unos y que recordó la magia del Carpena, de las grandes noches del Palacio de los Deportes.
El triunfo in extremis, sin embargo, no esconde los muchos defectos mostrados por el Unicaja durante la mayor parte del partido. La semana arrancó de forma penosa en Estambul, con derrota por 20 puntos ante el Efes (87-67), e iba camino del abismo ante Bilbao Basket hasta que llegó la remontada: 82-77.
Mucho trabajo queda por delante, a partir de esta mañana y durante una semana en la que el equipo debe capear el temporal ruso y seguir ganando en la ACB, donde es séptimo, y con una buena racha de tres victorias consecutivas. Joan Plaza mantiene las bajas de Stefan Markovic y de Jamar Smith para las próximas semanas. El club sigue mirando el mercado de pívots.
