Mindaugas Kuzminskas jugó ayer sus últimos minutos vestido con la camiseta verde del Unicaja. El alero lituano fue el último jugador verde en retirase tras el partido porque se quedó aplaudiendo en el centro de la cancha a la marea verde, en una clara despedida de la que ha sido su afición las tres últimas temporadas.

Después, cuando el equipo regresó al parqué desde el vestuario, el báltico volvió a ser el más aclamado y el último en abandonar la pista otra vez, recibiendo el cariño de la afición y algunos mensajes como "te echaremos de menos".