El Unicaja, aún con el éxtasis de la consecución del título de campeón de la Eurocup, regresa a la Liga Endesa con solo un día de entrenamiento para medirse al Rio Natura Monbus Obradoiro, que se encuentra en una situación comprometida, aunque repletos de optimismo tras ganar la pasada semana en Badalona.

El conjunto cajista, que el miércoles ganó la Eurocup y el jueves lo celebró con toda la ciudad, acabó ya de madrugada. Tuvo celebración con recepción en la sede de Unicaja y en el Ayuntamiento, y una posterior cena de todo el equipo. Así que Joan Plaza citó a sus hombres ayer por la tarde, para realizar una única sesión antes de viajar a Santiago de Compostela, donde el equipo aterrizó ya por la noche.

El cansancio, la resaca y la distracción por el éxito en la Eurocup pueden ser un factor determinante para el devenir del encuentro, ya que el equipo gallego de Pepe Pozas se encuentra más fresco y ha tenido más tiempo para preparar el encuentro.

El técnico del Unicaja, Joan Plaza, tiene algunos jugadores con problemas físicos, como el escolta Nemanja Nedovic, que jugó con molestias los dos últimos encuentros de la final de la Eurocup contra el Valencia Basket, y el pívot Dejan Musli, que podría reaparecer tras más de tres semanas de baja por un esguince de tobillo.

«Vendrán más confiados, contentos y más motivados. Llevan más de 15 años jugando dos partidos a la semana, no creo que lo acusen», señaló el entrenador del Obradoiro, Moncho Fernández, para quien las opciones de victoria pasarán por igualar «la intensidad» del Unicaja. El encuentro dará comienzo a las 20.00 horas en el Multiusos Fontes do Sar de Santiago de Compostela. Que la resaca no sea muy dura.