Se llama Sofía Arcos, tiene 17 años cumplidos el pasado mes de agosto y se convirtió el sábado en la primera jugadora en edad júnior en debutar con el Unicaja en Liga Femenina 2, la categoría de plata del baloncesto español.
La alero malagueña entró en la pista a falta de poco más de un minuto para el bocinazo final del choque que las verdes jugaron contra el Unigirona (71-61). Le dio tiempo a anotar dos puntos en dos tiros libres en los que no le falló el pulso, a pesar de los nervios de un debut que no esperaba. A su entorno le confesó, tras el partido, que estaba nerviosa y con miedo justo antes de lanzar esos libres que le permitieron estrenar su casillero anotador en la categoría de plata del basket nacional.
Sofía fue una habitual ya el pasado curso en las convocatorias del Unicaja de Lorena Aranda en Primera Nacional, teniendo también su cuota de protagonismo en el agónico ascenso logrado a la LF2. En su segundo año en edad júnior, estaba previsto que "Sofi" fuera una ayuda puntual en el primer equipo verde, sobre todo en los entrenamientos, pero no tanto en los partidos de Liga. Sin embargo, la lesión de Angelique Robinson ha dejado un hueco en la plantilla que Sofía ha aprovechado para convertirse en habitual en las convocatorias de estas primeras jornadas de Liga, a la espera de que la exterior norteamericana regrese a las pistas tras la operación a la que fue sometida hace ya varias semanas en su rodilla.
El éxito de "Sofi" es el de una jugadora que ha trabajado muy duro desde que empezó a jugar en las filas de Maristas con 9 años. Pasó también por la cantera de Presentación en su último año de Minibasket, antes de incorporarse a las filas del CB El Palo, desde donde dio el salto al Unicaja en su último año de cadete.
Sofía forma parte de la plantilla del equipo júnior del club verde, que dirige Daniel Martín, que a su vez es técnico ayudante de Lorena Aranda en el primer equipo, por lo que la conoce bien y sabe todo lo que puede aportar a las "mayores". Juega con su equipo la Liga Júnior y la Liga Senior, lo que unido a su presencia con el Liga Femenina 2 le obliga a veces, como este fin de semana, a jugar hasta tres partidos en poco más de 24 horas. Y es que la malagueña jugó la noche del viernes en San Pedro contra el Linces en Liga Senior (anotó 15 puntos), el sábado por la mañana contra Maristas, en Liga Júnior (22 puntos) y por la tarde tuvo su bautismo con el primer equipo ante el Unigirona.
La jugadora costasoleña, además de jugar bien al baloncesto, es una alumna ejemplar en el colegio Maristas, donde cursa segundo de Bachillerato con unas notas muy brillantes, siendo un ejemplo perfecto de cómo se puede hacer deporte de alto nivel y estudiar al mismo tiempo.
