No fue una noche sencilla en el Carpena. El Unicaja ganó al MoraBanc Andorra y se queda ahora a un paso de clasificarse para los cuartos de final de la Eurocup, pero antes y durante el partido el ambiente no fue el mejor en el coliseo cajista.

Antes de empezar el partido varios aficionados pitaron en la presentación al técnico cajista, Luis Casimiro. Justo después de ese momento, un grupo de aficionados mostraron su malestar mirando al palco, algo que provocó la reacción del presidente Eduardo García, con gestos hacia ese grupo de seguidores que no fueron a mayores.

El momento más delicado fue en el descanso entre el tercer y el cuarto periodo. En ese instante, un aficionado se acercó a las inmediaciones del palco con una pancarta en la que se podía leer: "Eduardo, vete ya. Incompetente. Dimite". Un guardia de seguridad trató de expulsarlo del lugar, algo que encendió a los aficionados que estaban en esa zona. El presidente reaccionó de forma hábil solicitando vigilante que no interviniera y dejara con su protesta al aficionado, al que se acercaron inmediatamente después varios trabajadores del club, con los que estuvo charlando durante unos minutos.

Afortunadamente, la victoria calmó los ánimos. Ojalá sea la última vez esta temporada en la que lo extradeportivo sea noticia durante la disputa de cualquier partido del equipo verde.