No es tan simple como elegir entre prótesis redondas o anatómicas, hay otros aspectos fundamentales que se deben considerar antes de realizar un aumento de senos. Para no equivocarse es esencial escoger un cirujano plástico experto

Actualmente la mayoría de pacientes se informa sobre los procedimientos de cirugía estética antes de acudir a la consulta, para tener algunas nociones y elaborar un listado de preguntas. Sin embargo, en algunos medios se tiende a simplificar en exceso y cuando la paciente acude a la consulta se sorprende porque hay que tomar muchas otras decisiones, explica el doctor Juan Martínez Gutiérrez, experto en aumento de pecho en Málaga, Marbella y Granada y miembro de las sociedades científicas en España (SECPRE) y a nivel internacional (ASPS), y colabora con los fabricantes de prótesis mamarias.

Para lograr un resultado bonito, elegante y duradero es importante realizar un meticuloso estudio anatómico y atender a los deseos de la paciente. Luego se debe decidir sobre la forma, el tamaño, la envoltura, el relleno, las incisiones y plano de colocación.

La forma de la prótesis mamaria puede ser redonda o anatómica. Ambas son buenas opciones pero dependiendo del caso será más recomendable una forma que otra. Las redondas son las clásicas y sólo aportan volumen. En cambio las anatómicas, como su nombre indica, se adaptan perfectamente al cuerpo y ayudan a dar forma al pecho.

El tamaño de las prótesis mamarias dependerá de la anatomía de la paciente. Para lograr un aumento de senos natural se debe calcular los márgenes adecuados para que elija la paciente y consiga una silueta armoniosa.

En aumento mamario la envoltura de los implantes redondos puede ser lisa o con textura, en cambio para los implantes anatómicos se opta por envolturas con textura para minimizar el riesgo de rotación. Además existe la posibilidad de escoger implantes con envoltura de poliuretano que mejoran el agarre a los tejidos y reducen el riesgo de encapsulamiento.

El relleno de las prótesis mamarias modernas es de gel cohesivo de silicona. Este material imita muy bien la turgencia de un pecho natural y es muy duradero. La alternativa más reciente son los implantes ligeros B-Lite, cuyo relleno puede llegar a ser un 30% más ligero, lo que ayuda a prolongar los resultados en el tiempo.

La ubicación de las incisiones dependen de las preferencias de la mujer, de sus características anatómicas y del tipo de implante. Las opciones: incisión alrededor de la areola, incisión por debajo del pliegue de la mama o incisión en la axila.

Por último, el plano de colocación puede ser por detrás de la glándula mamaria, entre la glándula y el músculo, o bien parcialmente por debajo del músculo pectoral. "Esta última opción, también conocida como plano dual, es nuestra preferida porque logra excelentes resultados", explica el doctor Martínez Gutiérrez.

Algunos cirujanos plásticos son reacios a emplear implantes anatómicos o realizar determinadas técnicas porque es necesaria una mayor planificación debido a su complejidad. "Es fundamental individualizar cada caso y ofrecer a la paciente la mejor solución posible por difícil que sea", explica el doctor.