­El consejero de Educación, Cultura y Deporte de la Junta, Luciano Alonso, volvió ayer a arremeter en Madrid contra el proyecto de reforma de la formación profesional que viene aparejado a la aplicación de la LOMCE; una modificación que sustituye a los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI) y cuyo presupuesto, según informaron fuentes de la Junta, no será aclarado por parte del Gobierno hasta los meses «de junio o julio».

Alonso, que junto a los representantes de Canarias y Asturias encabeza la oposición a la norma, abogó ayer al término de su reunión con el ministro José Ignacio Wert por paralizar los cambios, que, en su opinión, suponen un auténtico «camino de espinas» para la planificación del curso. Entre otros aspectos, por la falta de concreción presupuestaria, que no se determinará hasta el verano, pese a que las autonomías suelen tener lista su oferta en abril para cumplir con el calendario y garantizar la cobertura de las asignaturas que se pongan en marcha.

Las mismas fuentes ahondaron también en la falta de claridad y la desventaja que supondrá para el alumnado, que, con la nueva reforma, al contrario de lo que ocurría con los PCPI, no obtendrían al finalizar la rama con el título de ESO.

Según la Junta, el ministro Wert reconoció ayer a los presidentes autonómicos que el Gobierno carece de presupuesto para impulsar la Formación Profesional Básica, que está pendiente de la llegada de fondos europeos, aunque todavía no existe nada concreto ni una línea de aplicación determinada. «No hay respuesta para los interrogantes. El ministro nos ha tomado el pelo en las diferentes Conferencias Sectoriales», lamentó Alonso.

El consejero aludió a la incertidumbre que genera la LOMCE y criticó al Gobierno, que, a su juicio, «solo trata de ponerla en marcha sin consenso, sin buscar puntos de encuentro, con un criterio centralita y alejado de la capacidad de decisión de las comunidades autónomas».

Respecto a la Formación Profesional Básica, Alonso subrayó que los antiguos programas tenían «una buena oferta» y estaban «bien desarrollados», pero que ahora los alumnos «se estarán preguntando qué titulación van a tener o cuál será su oferta formativa». En esa misma línea, trasladó que los padres «no saben dónde van a llevar a sus hijos» y los profesores que formaban parte del sistema educativo de los PCPI «no conocen cuál va a ser su situación».

A la entrada a la entrevista, Alonso mostró algunas de las preguntas destinadas a Wert, a quién interpeló acerca de si es posible planificar una oferta de FP Básica sin conocer los criterios para su financiación. «Nunca pensé que en la ley de educación del siglo XXI nos encontraríamos en esta situación de improvisación continua, en la que solo acierta cuando va rectificando», resaltó después del encuentro.