­El secretario de Política Institucional del PSOE en Andalucía y portavoz socialista en la Diputación, Francisco Conejo, salió ayer al paso de las críticas del PP en el municipio de Rincón de la Victoria, en relación a la supuesta ilegalidad de las obras de instalación de una piscina prefabricada dentro de la parcela de su domicilio.

Aseguró, entre otros aspectos, que obtuvo en 2007 la preceptiva licencia municipal y que abonó las correspondientes tasas públicas. El responsable socialista indicó durante un acto celebrado en Marbella que pagó aquel año «sus tributos, después de sacar la licencia con los informes correspondientes favorables».

No obstante, el Área de Urbanismo del Ayuntamiento rinconero, a instancias del alcalde y portavoz del PP en el gobierno de la Diputación, Francisco Salado, ha puesto en marcha un «expediente sancionador y otro de protección a la legalidad urbanística», a raíz de que se haya podido construir la citada piscina «sin licencia».

El también concejal socialista en el Ayuntamiento de la capital malagueña remarcó que la documentación reglamentaria acredita los trabajos que se desarrollaron en la parcela de su domicilio familiar. Así replicó a los dirigentes locales del Partido Popular, que el pasado viernes le instaban a explicar por qué se había construido una piscina en su residencia de Rincón de la Victoria sin disponer de la correspondiente licencia.

El Ayuntamiento, como confirmó Salado a este periódico, inició los trámites para abrir un expediente a raíz de la denuncia presentada por una abogada, a título particular, ante el propio Consistorio. Dicha demanda luego derivaría en la apertura de un expediente sancionador, en base a los datos instruidos por el personal técnico municipal. Según el Ayuntamiento, Conejo pidió la licencia y pagó las tasas de la obra en 2007, pero no obtuvo el permiso hasta 2009. Unas fotos aéreas muestran la piscina construida en 2008.