¿Qué puede contar de El clan de las divorciadas?
Es una obra que ha permanecido en Francia 9 años con éxito. Ha llegado a España y hemos estado una temporada completa en Madrid. Comenzamos la gira en Alicante.
¿Cómo se siente al interpretar en esta comedia a una extranjera?
Los idiomas no se me dan muy bien, era mi asignatura pendiente en el colegio. Tengo que parecer extranjera y poner acento. Me preparé el papel escuchando conversaciones en inglés a través de YouTube. Es un personaje que pasa por muchos altibajos y es más listo de lo que el público piensa.
¿Qué personaje le gustaría interpretar?
Me apetece experimentar otro tipo de personajes, más dramáticos. El problema es que me gusta hacer reír a la gente. La comedia me encanta y me siento cómoda ahí.
¿Mejor teatro o televisión?
En la televisión muchas veces no están los guiones completos, no hay orden y no sabes qué le va a pasar a tu personaje. El teatro empieza y acaba, me gusta y me divierte mucho porque es actuar en directo.
¿Cómo asimilan el éxito de la serie La que se avecina?
Son nueve temporadas ya... Todo el equipo está emocionado. Nos sigue yendo muy bien y tenemos ganas de ir a por la décima temporada.
Cristina Castaño abandonó recientemente la serie...
Le deseo que se sienta feliz y a gusto con los próximos proyectos que afronte en su vida. Si es su decisión, me parece genial y la respeto.
Está grabando la nueva temporada de la serie, continúa con la gira teatral, es modelo, presentadora, empresaria de la firma de complementos Namdalay, tiene una canal de Youtube con más de 120.000 suscriptores y ha escrito un libro. ¿Sus días tienen 24 horas?
Al escucharlo solo puedo decir: «Joroba, cuántas cosas». Sí, mi día es de 24 horas, lo que pasa es que se me da bien encajar las cosas. Lo más importante es que todo lo que hago me hace mucha ilusión. La verdad , visto así, es que me cunde mucho el tiempo.
¿Sabe lo que es tener un rato libre?
Tengo pocos. Cuando los tengo me gusta pasear, escribir, estar con los amigos, vamos, lo normal. Es verdad que paro poco en casa y el hecho de estar ahí ya es para mí desconectar. Este año no he tenido vacaciones y lo que estoy deseando es llegar a casa para relajarme, disfrutar de estar con mis animales y mis cosas y tumbarme en el sofá.
Lleva años escribiendo en el blog Reflexiones de una rubia, -también el título de su libro-, ¿lo hace por la necesidad de compartir experiencias o por desahogarse?
Desde pequeña escribía cuentos y cuando los niños jugaban en la calle yo me quedaba escribiendo y dándole vueltas a la imaginación. Siempre me ha gustado escribir. Desde que empecé el blog, contando mi punto de vista de la vida, muchos seguidores me pedían que profundizase más, por eso decidí escribir el libro y contar las cosas que a mí me han ayudado para llegar al punto de mi vida en el que ahora me encuentro.
¿Le gustan los libros de autoayuda?
Me han ayudado mucho. Cuando empecé a pensar que la vida no podía ser como yo la vivía y que debía ser algo más, empecé a buscar el punto para sentirme bien conmigo misma. Y ahí arrancó mi búsqueda. Cogía libros, miraba, subrayaba... me encantan los libros de autoayuda y autocrecimiento. Me gusta investigar, ir a cursos y buscar herramientas nuevas.
¿Me daría la receta de cómo se puede ser feliz sin dejar de ser tú mismo?
En el libro lo explico [ríe]. Es una manera de enfocar la vida. La mente no se puede dejar en el piloto automático y que ella decida por sí sola. Igual que se va al gimnasio para estar a tope, hay que ejercitar la mente. Todo empieza desde el momento en el que uno abre los ojos y empieza a imaginarse cómo quiere su día. No valoramos lo que tenemos porque perdemos la perspectiva por el camino. Hay que filtrar bien los pensamientos del día a día porque eso es lo que va a forjar nuestro futuro.
