El tribunal regional de Braunschweig ha recibido 750 demandas de accionistas de Volkswagen en las que se le exigen cerca de 8.200 millones de euros por los daños ocasionados fruto de la manipulación de las emisiones de los vehículos diésel.

Las demandas han sido presentadas en este tribunal, cercano a la sede de la compañía en Wolfsburg, en nombre de 1.400 inversores apenas un año después de que estallara el escándalo de las emisiones, según indica la BBC.

Como parte de las medidas para hacer frente a este caso, Volkswagen ya tiene provisionados 16.200 millones de euros destinados, entre otras cosas, a cubrir las posibles demandas que pudieran presentarse.

El tribunal ha informado de que, para hacer frente a las demandas, ha contratado a personal adicional. Las denuncias se presentaron el pasado 18 de septiembre, un día antes de que se cumpliese un año del estallido del escándalo y expirase el periodo para realizar las reclamaciones judiciales.

En la mayor parte de los casos, las demandas tienen carácter colectivo y proceden en buena parte de inversores particulares, que denuncian a la compañía por no haberles informado convenientemente acerca de los sistemas de manipulación de las pruebas de emisión en cerca de 11 millones de vehículos.

Volkswagen, que dice haber cumplido las exigencias de información de los distintos mercados donde opera, tiene que hacer frente además a una demanda por 3.300 millones de euros presentada también en el tribunal de Braunschweig por el letrado Andreas Tulip en nombre de inversores institucionales.

La compañía automovilística ya ha cerrado en Estados Unidos un acuerdo para compensar a sus clientes y evitar reclamaciones judiciales, lo que le ocasionará un coste de 10.200 millones de dólares (9.150 millones de euros).