En agosto de 2009, ´Línea Directa´ se hizo eco de la complicada situación de Miguel Domínguez, quien desde los 9 años hasta los 71 ha trabajado de peluquero en Churriana.

A causa de una flebitis perdió las dos piernas y hasta la fecha, no ha conseguido que ninguna institución se haga cargo de la adaptación de la casa en la que vive, una vivienda en alquiler de dos plantas en la barriada de ´La Noria´, propiedad de la Junta de Andalucía.

Las cuentas no le cuadran a Miguel, que tiene que subir a su dormitorio y acudir al cuarto de baño con la ayuda de dos hijos. "Me llevan en brazos y a veces me meo en los pantalones porque no me da tiempo a llegar", explica.

Las cuentas además siguen sin salirle para poder adaptar una casa que no es de su propiedad, sino de la Junta de Andalucía. "No tengo un duro, tengo tres hijos y los tres parados, vivo con dos de ellos y mi hija cobra la ayuda de la dependencia, 319 euros al mes, más mi pensión, 554 euros, que se queda en el banco para pagar la luz, el agua y todo", resume. Miguel paga un alquiler cercano a los 50 euros.

"El pan lo tomamos duro y la manteca no la vemos, comemos potaje todos los días, menos mal que la gente ayuda" cuenta.

Es el caso del club de fútbol de Churriana, que ayudó a fundar, y que además de homenajearlo, ha tenido la generosidad de comprarle una silla de ruedas eléctrica, que le ha alejado de la depresión de los primeros momentos. "Ha habido mucho cambio con el carrito eléctrico, ahora me hago más a la idea de lo que me ha pasado", confiesa.

Imposible. Sin embargo, en la casa actual tiene que contar con sus hijos para desplazarse e ir al cuarto de baño. Con unas ayudas autonómicas que en el mejor de los casos serían del 40 por ciento de la obra y adelantando todo el dinero, los presupuestos que ha consultado para arreglarle la vivienda se mueven entre los 16.000 y los 18.000 euros. ¿Cómo pagar el 60% de esas cantidades con su situación actual?

En su reclamación le apoya el concejal de IU, Antonio Serrano, quien ha intentado hacer gestiones que alivien su situación y critica que al pedir ayuda en el Ayuntamiento "me encontré con las puertas cerradas". Con respecto a la Delegación de Vivienda de la Junta, ha señalado que la administración autonómica "debería tener un procedimiento de urgencia para otorgarle una vivienda adaptada", si no ´cuadran´ las ayudas oficiales a la exigua paga de Miguel.

También trata de ayudar el presidente de la asociación de vecinos de La Noria, Juan Martínez, quien señala: "La ayuda la veo muy bien, pero si la casa es de la Junta, ¿por qué no la arregla?, la familia no tiene un duro. Es un tema de humanidad"