La limpieza en Málaga no es buena y no mejora. Así lo creen los propios trabajadores de Limasa que han vuelto a estimar, como lo hicieron en años anteriores, que los ciudadanos de la capital no están demasiado satisfechos con el servicio que presta la empresa.

El problema es que llueve sobre mojado, ya que la respuesta no es nueva, se ha venido repitiendo en la encuesta que cada año realiza la dirección de Limasa para conocer el clima social. En ella, un grupo de 344 personas, que supone el 21,5% de la plantilla y que son seleccionadas de forma aleatoria y proporcional de todos los departamentos que tiene la empresa, responde a diversas preguntas que tratan de conocer de manera global cómo respira la plantilla en cuestiones como entorno de trabajo, formación, retribución, promoción, imagen de la empresa relaciones de trabajo o mejoras.

A la pregunta: ¿cree que los ciudadanos de Málaga están satisfechos como el servicio que presta Limasa?, la respuesta es negativa en todos los grupos de trabajadores preguntados excepto en el del Centro Ambiental. Las respuestas más negativas se dan especialmente en los dos grupos de trabajadores que operan en la calle, que son los conductores y los operarios de servicio. Además se trata de una de las respuesta que obtuvo una puntuación media más baja de todas las realizadas.

Esta percepción negativa del servicio que presta Limasa está relacionada con la imagen de la empresa, una imagen de cara al exterior de la que la plantilla no se siente muy satisfecha. Los que se sienten menos satisfechos con esta imagen son el personal de oficina y los que más satisfechos los del vertedero.

Sin mejoría. Lo cierto es que algo tendrán que ver los trabajadores con esa mala imagen pues en la encuesta consideran que ellos influyen bastante en dicha imagen. Los coordinadores de servicio son los que más creen que influyen en la imagen que da Limasa, seguido de los operarios del vertedero y los del servicio de calle. Lo peor de todo ello es que la plantilla asegura en la encuesta que no encuentran mejoría en Limasa. La plantilla tiene una buena valoración de sus jefes y, a la inversa, también está bien valorado el trabajo de las personas que tienen a su cargo.

Sobre retribución, la plantilla tiene una valoración aceptable, especialmente los operarios de servicio. Además consideran adecuado su entorno de trabajo y se sienten en general bien con el puesto de trabajo que desempeñan. En última instancia dan un valor intermedio a la pregunta de si consideran que en la empresa se reconoce el cumplimiento de sus funciones y tareas.