El equipo del gobierno de la Diputación de Málaga ha realizado una remodelación de su estructura, por la cual la diputada provincial de Economía y Hacienda, Francisca Caracuel, asumirá la vicepresidencia primera en sustitución de Francisco Oblaré, que se hará cargo de una nueva área de Gobierno Abierto y Nuevas Tecnologías con rango de vicepresidente cuarto. Oblaré, además acaba de ser nombrado coordinador general del PP de Málaga, por lo que se entiende que Bendodo lo quiere más centrado en el día a día del partido.

El máximo responsable del ente supramunicipal, Elías Bendodo, precisó que en esta reestructuración «se da prioridad al área económica y se apuesta de forma decidida por la transparencia». A su juicio, el primer año de gestión de los populares ha servido para «identificar nuevas necesidades, definir otros objetivos y adaptarse a la realidad de la institución y de la provincia».

«Quiero transformar la Diputación en una organización transparente, solvente, abierta a la ciudadanía y eficiente en su funcionamiento», declaró el presidente, que incidió en que esta nueva estructura «sigue centrada en la modernización y los ciudadanos», añadiendo ahora a sus ejes de gestión «la economía y la transparencia».

De esta forma, explicó que el trabajo de Caracuel en Economía, con una gestión «eficaz y austera», ha resultado «clave para sanear la situación económica de la institución, a pesar del lastre que supone la deuda financiera heredada de la anterior corporación».

«La ayuda a municipios y el pago a proveedores en tiempo y forma han sido los ejes centrales de su labor», dijo Bendodo, quien realizó ayer mismo el primer encargo a la «flamante» vicepresidenta primera de la Diputación: la puesta en marcha de un plan de inversiones productivas con incidencia en todas las comarcas.

La diputada seguirá al frente de Economía y Hacienda y será responsable del área de Modernización Local, asumiendo las competencias también en Urbanismo y Planeamiento, Fomento y Atención al Municipio, que formarán un solo área a cargo de Ignacio Mena; Recursos Humanos y Servicios Generales, y Centro Cívico, en manos de Juan Jesús Fortes; Servicios Intermunicipales y Consorcio Provincial de Bomberos, a cargo de Abdeslam Lucena; y Patronato Provincial de Recaudación, con José Alberto Armijo.

Nuevo modelo de gestión. En cuanto a Oblaré, será el encargado de «integrar la transparencia en todos los procesos de la Diputación de Málaga», ya que «un gobierno que quiera caminar hacia el futuro no puede hacerlo sin apostar por la transparencia y las nuevas tecnologías» precisó.

El presidente de la institución provincial mostró su confianza en Oblaré para desarrollar este nuevo modelo de gestión con el que «se pretende mejorar la imagen que los ciudadanos tienen de la política, basado en la honradez, la transparencia y la austeridad». «Es el hombre idóneo para esta misión», aseguró.

Por su parte, Pedro Fernández Montes continuará como responsable de Relaciones Institucionales de la Diputación en calidad de vicepresidente. Con la reordenación adquiere más competencias la vicepresidenta Ana Mata, con Desarrollo Económico y Rural y Medio Ambiente y Sostenibilidad, lo que «reforzará su labor de gobierno». Francisco Salado seguirá como portavoz del equipo de gobierno.