La celebración de una barbacoa, una paella e incluso una primera comunión, partidos de fútbol y actividades que concluyen a las 2 de la mañana, con la megafonía a todo trapo, pelotas que caen a la calle cada diez minutos o bloques con los vecinos sin dormir y además cegados por unos focos que ya los quisieran clubes de Primera División.

El concejal socialista Manuel Hurtado lleva desde julio de 2011 denunciando lo que considera falta de control en los campos municipales y el riesgo de que algunos clubes de fútbol a cargo de estas pistas los conviertan en «reinos de taifas que administran y desadministran en función de sus intereses».

Manuel Hurtado declara que las concesiones administrativas firmadas en 2008 por Urbanismo con los clubes deportivos para que llevaran los campos de fútbol, en un intento de unificar la gestión, «han fracasado porque no se ha supervisado». Y pone de ejemplo la documentación municipal que pudo consultar en noviembre, en la que la mayoría de los clubes no ha cumplido con la obligación de contar con un seguro de responsabilidad civil, realizar una memoria anual de actividades, tener un horario o presentar los estatutos actualizados.

«En suma se incumplen las obligaciones contractuales y hay dejación de funciones por parte del Ayuntamiento porque no ha habido control ni una vigilancia de las instalaciones que se han cedido».

El concejal socialista, que mencionó como uno de los ejemplos más llamativos la celebración de una primera comunión en el campo de la Mosca, habló ayer delante del campo de deportes de San Ignacio, en El Palo y destacó que, precisamente, es uno de los que recibe más quejas de los vecinos, que se han organizado en una plataforma contra el ruido.

María Antonia Martín, consejera del PSOE en el distrito Este, llamó la atención sobre la falta de carteles con las tarifas y horarios en la puerta del campo, como obliga la normativa y subrayó que los vecinos están «muy tensos» por la contaminación acústica y lumínica.

Además, informó de que la semana pasada, la plataforma antirruido tuvo una reunión con la concejala del distrito Este, Carmen Casero; así como con el director de Medio Ambiente Luis Medina-Montoya y el director del área de Deportes, Javier Imbroda.

Miembros de la plataforma enumeraron algunos de los problemas que les causa el campo de fútbol de San Ignacio. «Antes de que se arreglara el campo, que ha quedado muy bonito, había partidos los domingos a las 11 de la mañana, ahora, cualquier día y a cualquier hora», resume un vecino.

El ruido es una de las principales quejas, y detallan que la megafonía se emplea «para hablar, poner música, pegar la bronca, llamar la atención a la gente y a veces para radiar el partido». La megafonía, subrayan, está varios decibelios por encima de lo permitido y «se escucha en El Tintero y en la calle Mar». La plataforma pide desinstalar los altavoces e instalar un par en cada extremo del techo de tribuna «para infomar de la alineación».

También hay quejas por las planchas laterales metálicas, que cuando la pelota golpea «provoca un ruido ensordecedor», piden que se revise la distancia de los focos del campo con las viviendas y critican que el verano pasado el campo se cerrara a las 2 de la madrugada. «Mi hija, que toca el violín, ha tenido que insonorizar su cuarto, y el Ayuntamiento no sabe y no quiere saber qué ocurre en sus instalaciones», critica un vecino.

La asociación de vecinos del Duende también tiene quejas de su campo de fútbol. Luis Carlos Velasco, el presidente, destaca que muchos partidos de fútbol «terminan después de medianoche» y que la altura de las redes del campo no es lo suficientemente grande, «así que en las competiciones oficiales, con que estés diez minutos verás cómo las pelotas caen a la calle y a los balcones».

Respuesta de Deportes. El director del área de Deportes, Javier Imbroda, indicó ayer a La Opinión que «nos hacemos cargo de las críticas, pero no son una cosa masiva sino puntual». Imbroda subrayó que el convenio con los clubes contempla la visita de un técnico municipal «que todos los meses supervisa si se cumple la normativa» en materia de horarios, seguros, luces, etc... y anunció que el convenio con los clubes se está mejorando con los servicios jurídicos del Ayuntamiento, para contemplar entre otros aspectos sanciones si los clubes no cumplen los requisitos. Javier Imbroda también apeló «a la educación cívica de los responsables de los campos».