El presidente de la Diputación de Málaga, Elías Bendodo, ha firmado hoy un decreto de emergencia que destinará tres millones de euros a ayudas urgentes para paliar los daños del temporal de lluvia del pasado 28 de septiembre. Esta cantidad servirá para realizar obras inaplazables en la red viaria provincial y también para subsanar desperfectos en infraestructuras hídricas de hasta 32 municipios, así como para reponer equipamiento relacionado con el arreglo de caminos y la recogida de residuos.

El presidente ha destacado la celeridad con la que se ha confeccionado este decreto de emergencia, ya que han pasado apenas diez días desde el temporal y aún están en proceso muchas labores de limpieza y recuento de daños en las zonas más afectadas. La implicación de todas las áreas de la institución ha hecho posible la liberación de unas ayudas caracterizadas por la inmediatez, que solventarán las consecuencias más graves de la riada.

La primera parte del decreto consta de un millón de euros que se destinará íntegramente a la red de carreteras propiedad de la Diputación, en la que se han visto afectados 440 kilómetros del total de 860 que tiene. El presidente ha aclarado que no están cortados estos 440 kilómetros, sino que esta cifra es la suma de las vías que se han visto perjudicadas en algún tramo por las lluvias. Se trata de 52 carreteras en total.

"Vamos a ejecutar las actuaciones que son inaplazables, es decir, la apertura del paso al tráfico rodado y la certificación de la seguridad vial", ha explicado Bendodo. Cabe recordar que de este millón de euros ya se han invertido 175.000 en los primeros días tras la riada y que los 825.000 euros que restan se ejecutarán a partir de hoy.

En la comarca de la Axarquía, los trabajos se concentrarán en la retirada de desprendimientos y piedras de las calzadas y la corrección de estabilidad de laderas, principalmente, con un presupuesto de 140.000 euros. En Antequera y la zona norte la prioridad es limpiar las invasiones de arrastres y barro, corregir taludes y estabilizar laderas, a lo que se destinarán 180.000 euros.

En lo que respecta al Valle del Guadalhorce, los técnicos de la Diputación estiman que lo más urgente es apuntalar taludes inestables, limpiar desprendimientos de barro y deslizamientos superficiales, acciones que costarán 195.000 euros. Por último, en la Serranía de Ronda se invertirán 310.000 euros en corregir desprendimientos de laderas y liberar calzadas de invasiones de piedras.

"Nuestro objetivo no es sólo restablecer las comunicaciones entre los municipios más pequeños y la éstos con los grandes núcleos, sino también facilitar las conexiones para que las cosechas se puedan recoger", según Bendodo. En este sentido, la reapertura de vías dañadas permitirá a los agricultores hacer su trabajo, por ejemplo, en la recolección de la aceituna.

El presidente ha recordado que también los consorcios de maquinaria de la Diputación trabajan a pleno rendimiento desde el día de la riada para reparar caminos e infraestructuras dañadas.

Al millón de euros de actuaciones de emergencia previstas en el decreto firmado hoy se suman otros 1.500.000 euros de obras no urgentes que formarán parte de un futuro plan de daños por temporales. Por tanto, Bendodo ha comunicado que los desperfectos totales en las carreteras de la red provincial ascienden a un total de 2.500.000 euros.

El fondo se completa con otros dos millones de euros que se destinarán a solventar problemas relacionados con las infraestructuras de los municipios y equipamiento de la Diputación. Los informes realizados por los técnicos de la institución sitúan en 32 el número de pueblos que tienen problemas en sus infraestructuras hídricas, es decir, saneamiento, depuración y abastecimiento. Se trata de colectores, conducciones, captaciones, acometidas, bombeos, depósitos e impulsiones en todas las comarcas.

También se han registrado daños en la planta de tratamiento de residuos de Valsequillo, así como pérdidas económicas por desperfectos en enseres como contenedores de basuras, vidrios y reciclaje. "La intención es devolver todo a su estado anterior a las lluvias", ha afirmado el presidente.

Por último, Bendodo ha recordado a los dos fallecidos por la riada y a la persona que continúa desaparecida como "la peor cara de la tragedia" y ha hecho público el balance final de actuaciones del Consorcio Provincial de Bomberos (CPB) de la Diputación: 176 intervenciones y 73 personas rescatadas de la tromba de agua.