La integración de Unicaja con el Banco Ceiss -propiedad de Caja España-Duero- puede estar más en al aire que nunca después de que la entidad castellanoleonesa recibiera ayer el visto bueno de Bruselas a su plan de reestructuración, lo que supondrá una inyección de 604 millones de euros procedentes del Fondo de Rescate (MEDE).

Ahora sobre la mesa se abren diversos escenarios. Uno, que las dos entidades logren cerrar un acuerdo de fusión antes de que Ceiss reciba los 604 millones de euros y cuya operación no podría dilatarse más de mes y medio y que además tendría que recibir la bendición de Bruselas, según confirmaron a este periódico fuentes financieras. El segundo escenario pasaría, de fracasar el primero, por la subasta de la caja castellano-leonesa al mejor postor en un plazo de cinco años en el que Unicaja podría pujar junto a otras entidades que estuvieran interesadas.

Tras conocer ayer el veredicto de Bruselas, Ceiss amenazó a través de un comunicado con romper el proceso y seguir en solitario, aunque fuentes de Unicaja restaron importancia al asunto e insistieron en que lo anunciado ayer por la UE está «en la línea con lo esperado» por esta entidad.

Lo cierto es que, tal y como adelantó La Opinión de Málaga el pasado miércoles, ambas entidades deberán decidir hoy en los consejos de administración que tienen convocados el futuro de un proceso que se inicio hace más de año y medio y que, por diversas circunstancias, no han terminado de rematar.

Este periódico desveló que la última tentativa de Unicaja era absorber Ceiss en lugar de fusionarse con ella, una vez que el banco hubiera sido nacionalizado y saneado por el FROB. Para ello necesitaba convencer a Bruselas de que le permitiera comprarla sin necesidad de concurrir a una engorrosa subasta con competidores de por medio.

Pero lo que se conoció ayer, de momento, es que la Comisión Europea ha ordenado al Gobierno español que Ceiss sea vendido a inversores privados en un plazo máximo de cinco años y que reduzca su balance un 30% de cara a 2017 como condición para el desembolso de la ayuda. Durante la presentación de estos planes de recapitalización del Grupo 2, el vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia, no mencionó a Unicaja en lo relativo a Ceiss.

Horas más tarde se fueron conociendo más detalles de las nuevas reglas de juego y que dejan más salidas que la de la subasta, como que ambas entidades cierren un acuerdo, pero siempre bajo la tutela de la Comisión Europea (CE).

Fuentes del sector restaron también importancia a que Ceiss presentara a la CE un plan de reestructuración en solitario y que contemplara también la evolución de la entidad en solitario. «Los planes que se presentan a Bruselas tienen que tener todo cerrado para que la CE pueda aprobarlos. Pero el hecho de que la fusión con Unicaja no se incluya en los planes no significa que Ceiss no se pueda unir a la entidad malagueña. Pueden seguir hablando», precisaron ayer fuentes del Banco de España.

De hecho uno de los puntos que deberán abordar hoy los consejos de las dos entidades es si siguen adelante con la fusión, ya que Bruselas ha marcado un plazo de mes y medio para que se concrete. En este punto, las citadas fuentes explicaron que «si antes de que se inyecte el capital ambos bancos llegan a un acuerdo, se podría estudiar si ese plan es aceptable», pero si la unión se produce después de este momento, Ceiss deberá enfrentarse a un proceso de fusiones competitivo.

Esto abriría una segunda vía. La posibilidad de que finalmente Unicaja se vea abocada a una subasta, viendo frustrado su deseo de comprarla en un proceso cerrado. Estas fuentes recordaron que Ceiss estudió en su día un proceso de fusión con Unicaja para fundar Unicaja Banco, una operación que no llegó a término.

Sobre si Ceiss podría ser liquidado en el caso de que no existiera interés sobre ella, las fuentes matizan que hay un plazo de cinco años para venderla. También avanzaron que en los casos de subastas, no habrá Esquema de Protección de Activos (EPA). «Son entidades que, tras la inyección de capital, son viables. Otra cosa es que por temas de competencia se considere que tienen que ser vendidas. La única que no se veía viable era Banco de Valencia que, o se vendía, o se liquidaba», subrayaron.

Tantas circunstancias no parecen hacer mella, sin embargo, en Unicaja. Fuentes de la caja malagueña reiteraban ayer que nada «excluye que pueda producirse la unión» con Ceiss aunque «adaptada a las actuales circunstancias».

1.500 despidos en dos años. Sí parece claro que la decisión de Bruselas de aprobar el plan de Ceiss -que incluye 1.500 despidos en dos años y el cierre de 260 oficias- ha envalentonado a esta entidad. Ayer mismo emitió un comunicado en el que aseguraba que el apoyo de la CE al plan supone «un claro impulso a la viabilidad, solvencia, solidez y sostenibilidad» del banco , y que incluso la ayuda «permite tener la posibilidad de seguir en solitario, cumpliendo las exigencias de Bruselas en materia de capital». En las próximas semanas se conocerá un informe para determinar el porcentaje de la participación del FROB.

Ceiss anunció que en su plan de negocio concentrará su actuación en su territorio «histórico» (Castilla y León, Extremadura y Madrid) y recordó la «firme convicción» de que las «dolorosas» medidas de ajuste «reforzarán» el proyecto en beneficio de sus más de dos millones de clientes. La inyección de 604 millones a Ceiss es inferior a los 2.063 millones de déficit que detectó Oliver Wyman, gracias a la transferencia de activos tóxicos inmobiliarios al «banco malo» por importe de 717 millones.