Son tres mil afectados por cláusulas suelo los que demandaron, ante un juez de Primera Instancia o de lo Mercantil, a sus entidades financieras por la existencia de cláusulas suelo en sus contratos hipotecarios. Sin embargo, son alrededor de 80.000, según la Asociación de Usuarios de Bancos (Ausbanc), los afectados en Málaga. Es decir, sólo el 3,7% del colectivo ha acudido al juzgado. Muchos no saben ni siquiera que existe esa cláusula y otros han optado por acudir a su entidad y negociar individualmente una solución, lo que entraña riesgos aunque ahorra un dinerillo, el de las tasas judiciales de Alberto Ruiz-Gallardón, ministro de Justicia. El Supremo ya declaró abusivas, y por tanto nulas, las cláusulas suelo de BBVA, Cajamar y Novacaixagalicia, pero no estimó pertinente que estas entidades tuvieran que devolver lo ya pagado hasta la declaración de nulidad ya que ello podía afectar, con los bancos rescatados, al orden económico nacional. Fue una decisión para estos casos concretos, pero falta la general sobre el asunto, una que siente jurisprudencia a la que deban someterse todas las entidades. Lo cierto es que otros bancos y cajas han retirado las cláusulas, algunas han optado por negociar con los clientes. La disparidad de las sentencias de las distintas audiencias abona la confusión. De momento, Málaga ha unificado ya doctrina.