Juan José Vázquez recuerda algunas de sus venta más golosas a nivel de números. Entre ellas está la venta a una subasta de un cuadro de un autor centroamericano del cual no recuerda el nombre, que vendió por unos 2.500 euros. En años anteriores y cuando comenzó con el negocio envió a una mujer de Tailandia varias cajas que contenían artículos de música como un clarinete, partituras y algunas cosas relacionadas con la decoración. Sacó por todo 400.000 pesetas.

Los tiempos han cambiado pero «La Trastienda» da para comer e invertir en la adquisición de nuevos productos que ofrecer.