Las últimas horas de Isabel Pantoja en libertad transcurrieron en su finca de Medina Sidonia, la Cantora, en compañía de su hijo Kiko y su hija Chabelita. Su hermano Agustín la llevó en su coche a primera hora de la mañana del 21 de noviembre de 2014. No pudo contener la emoción y rompió a llorar mientras su hermana era acompañada por dos funcionarias desde la puerta de ingreso al centro. Entonces, se supo que la cantante explicó a los médicos la medicación que estaba consumiendo dada su depresión y los problemas claustrofobia. Quizás, ese estado de ánimo empezó a fraguarse en su interior aquella madrugada del 2 de mayo de 2007 en el que fue detenida por orden del juez Miguel Ángel Torres en su casa marbellí de La Pera, o al día siguiente, cuando el instructor la dejó en libertad. O tras los años de instrucción o el día que conoció su condena, en abril de 2013. Pese a todo, nunca dejó de actuar. La tristeza no ha podido con ella.