­El móvil no deja de sonar. Por si hubo alguna vez dudas, las reiteradas felicitaciones dan buena muestra de que Elías Bendodo será, de nuevo, el hombre fuerte en la provincia. Desde uno de los despachos más privilegiados de la geografía nacional, habla de una legislatura que estará marcada por el «diálogo» y la «obligación de llegar a consensos» ante el veto de las urnas a las mayorías.

Presidirá usted la Diputación de mayor tamaño en manos del Partido Popular a nivel nacional.

Convertir Málaga en el referente del municipalismo para el PP a nivel nacional es muy importante para nosotros como Partido Popular de Málaga. Que el ayuntamiento de España más importante donde vaya a gobernar el PP sea el de Málaga y que la Diputación más importante donde vaya a gobernar el PP en toda España sea la de Málaga, nos da un respaldo evidente. Habla del fortín en el que se ha convertido el PP de Málaga y eso nos hace sentir orgullosos. Pero simplemente eso. Porque nuestro objetivo es construir políticas adaptadas a los nuevos tiempos que sirvan para mejorar la calidad de vida, tanto de los vecinos de la capital como de los de la provincia.

¿Qué peso han tenido Francisco de la Torre y Elías Bendodo a la hora de mantener el poder institucional en la provincia?

No sabría decir. Yo creo que hay una serie de circunstancias que reflejan un buen trabajo, tanto en la Diputación y en el Ayuntamiento, y que se ha hecho extensible al resto de los municipios. Los ciudadanos malagueños han sabido reconocerlo. Vuelvo a decir, nos sentimos orgullosos de los resultados. Hemos ganado las elecciones y mantenemos las dos instituciones más importantes a nivel local que tiene el PP en España, pero también es verdad que hemos perdido alcaldías muy importantes dentro de la provincia.

¿Cómo cree que se va a materializar esa nueva forma de hacer política de la que hablan todas las formaciones políticas?

La gente ha determinado que se acaben las mayorías absolutas. Hay que traducir la voluntad popular en una mayoría de diálogo y en mayorías de consenso. Ese es el ejemplo que hemos escenificado con Ciudadanos. Que los políticos nos pongamos de acuerdo con las principales reivindicaciones de la gente en la calle.

¿Ese diálogo se limitará exclusivamente a Ciudadanos?

Mano tendida a hablar con todos los grupos con representación en la Diputación. Yo espero que todo el mundo hayamos captado el mensaje de que la gente quiere consenso, con independencia de las ideas que pueda tener cada uno. Yo me voy a forzar en que todos se sientan representados.

¿Qué espera de la irrupción de Málaga Ahora?

Ahora mismo están en un papel que les distancia mucho de la ciudadanía. El tema del insulto y de la ofensa nunca acerca. En cualquier caso, tenemos que ver qué grupo constituyen y quién será el interlocutor.

¿La reducción de cargos de confianza significa que antes eran prescindibles?

No eran prescindibles, pero lo que tenemos que hacer es adaptarnos a las nuevas circunstancias. Ahora se multiplicará el trabajo y lo que hacían antes dos personas, tendrá que hacerla una. Hay que atender las reivindicaciones que hace la ciudadanía y lo hemos asumido perfectamente.

¿Espera estabilidad de Ciudadanos para los cuatro años de legislatura?

Espero que así sea y estoy convencido.

¿Qué proyectos tiene en mente?

Vamos a investir primero la nueva corporación y a partir de ahí será el momento de hablar de nuevos proyectos para el futuro. Pero tienen que vincularse a dos ejes: empleo y mejorar la calidad de vida de los malagueños.

¿Cree que se entenderá mejor con el PSOE en esta legislatura?

Para eso será necesario que anteponga la provincia a los intereses de su partido.

¿Cómo valora los pactos que han servido para sacar al PP de varios ayuntamientos?

Es mucho más estable un gobierno en minoría que un cuatripartito. Los acuerdos y los cordones sanitarios para desalojar al PP no los entiende la gente. Estoy seguro de que tendrá su respuesta en las urnas cuando toque.

¿Le hubiera gustado contar con C’s en el gobierno?

Yo les ofrecí que entraran en el gobierno. Pero su idea general en toda España, es la de no formar parte de ningún gobierno que no presidan. Ellos me han expuesto sus criterios generales a nivel nacional y yo tengo que respetarlos.

¿Le sorprendió el discurso aireado de Ysabel Torralbo?

Me sorprendió mucho. Yo no conocía a Ysabel Torralbo hasta el sábado, pero me habían hablado de ella como una persona moderada. Descubrí en el pleno de investidura, que lo que menos tiene es moderación. Lo demostró con su discurso preparado.