Los supermercados no sólo fueron frecuentados ayer por clientes en busca de la cesta de la compra. También se llenaron de voluntarios y ciudadanos dispuestos a echar una mano a los más necesitados. Añadir al carro de la compra un paquete de arroz o un litro de leche más puede significar mucho para quienes no pueden permitirselo. El Banco de Alimentos de la Costa del Sol, Bancosol, inició ayer por la mañana la campaña la Gran Recogida de este año en toda la provincia, que durará todo el fin de semana. El propósito es seguir ayudando a las familias necesitadas a través las 230 asociaciones que trabajan en las zonas más desfavorecidas. Hoy por hoy, Bancosol atiende a 55.000 personas en Málaga que no pueden cubrir sus necesidades básicas.

A la presentación de esta campaña solidaria acudieron el presidente de la entidad recaudadora Bancosol, Javier Peña; el diputado de Innovación Social, Participación y Cooperación Internacional de la Diputación de Málaga, Félix Lozano; la directora de Derechos sociales, Participación Ciudadana, Inmigración y Cooperación al Desarrollo del Ayuntamiento, Ruth Sarabia y como representante de El Corte Inglés, Eduardo Barrero, que hablaron de los propósitos de la campaña de este año.

Alcampo, Aldi, Baly, Carrefour, Covirán, Día, supermercados de El Corte Inglés, Eroski, Gros Merkat, Lidl, Makro, Mas, Maskom, Mercadona, Super Cash Samoy y Supersol son las firmas que colaboran con Bancosol en esta nueva acción solidaria de la Gran Recogida, en la que en total participan 342 establecimientos de 20 grandes superficies en toda la provincia.

Cada uno de estos comercios está señalizado con carteles, además de contar con la presencia de voluntarios, identificados mediante un peto de color blanco y en el fondo el logo de la asociación, para garantizar la seguridad del destino de estos alimentos.

Esta vez, se han desplegado 5.000 voluntarios en los diferentes establecimientos donde se están recolectando alimentos destinados a las personas más necesitadas.

Javier Peña recomienda donar alimentos no perecederos, tales como aceite, legumbres, leche, cereales, productos similares, y sobre todo, artículos de alimentación para bebés, de manera que se cubran las necesidades básicas de aquellos que no pueden hacerlo por sí mismo, y garantizar la continuidad de la alimentación de los más pequeños.

El objetivo principal de este evento es concienciar a las personas a que pasen por los diferentes establecimientos este fin de semana para que, mientras realizan sus compras, dediquen algunos productos a la campaña para los más necesitados.

Los productos recaudados en la Gran Recogida serán distribuidos a las asociaciones, por lo que la solidaridad de los malagueños será fundamental para que así la campaña puede lograr el objetivo de conseguir entre 750 y 760 toneladas de comida y superar la meta alcanzada el año pasado.

Después del periodo de recolecta, el trabajo de la asociación no termina, ya que el siguiente paso es la organización de los alimentos para entregarlos a los más necesitados.

En esta segunda fase, los malagueños que han participado, y los que no lo han hecho, pueden unirse al proceso de clasificación y estructuración de los alimentos a partir del día 30 de noviembre, en horarios de 9.00 a 13.00 horas y de 15.00 a 19.00.