La Fundación Solidaria Luna Nueva de Coín lleva diez años trabajando para proporcionar toda la ayuda necesaria a una serie de ciudades de Senegal, cuyos habitantes viven en una inmensa pobreza. Hay miles de personas indigentes y sobre todo niños huérfanos, sin ningún familiar que se haga cargo de ellos, desnutridos y durmiendo en plena calle.

El año pasado la asociación consiguió recaudar los fondos suficientes como para hacer una habitación para que niños sin familia que duermen en la calle tuvieran un techo donde pasar la noche. La cena organizada en la Bodega El Pimpi, donde se destinó el cien por cien de lo recaudado, hizo posible la construcción de dicha habitación que lleva el nombre de Pepe Cobos Mena, en la ciudad de Linguere. Los niños ya pueden dormir bajo techo, pero, de momento no tienen camas, solo una especie de colchones donde duermen como pueden.

Los voluntarios de la Fundación Solidaria Luna Nueva, junto a su presidente Manuel Oleas y su expresidente Juan Jiménez Frías, se marcaron un objetivo, conseguir camas para estos niños, a ser posible literas, para que puedan dormir la mayor cantidad de ellos. En total serían 90 los niños de la calle que conseguirían lo más parecido a un hogar, que es una habitación donde dormir resguardados y en una cama.

Para conseguir su objetivo, la fundación puso una pancarta en la calle, solicitando ayuda. Pronto llegó a oídos de dos empresarios solidarios; la Bodega El Pimpi y Mi Colchón, que se hicieron cargo de la compra de 45 literas.

Las literas ya están camino de Senegal. Salían hace unos días en un contenedor que también llevaba medicinas, alimentos, colchones, ropa, jabones, juguetes e incluso gominolas. Todo ello llegará a la capital, Dakar, y de allí se distribuirá por distintas ciudades como Emboula, Mbour, Nguith, Gassane y por último Linguere, ciudad donde El Pimpi tiene su habitación solidaria y donde ahora llegarán las camas.

Tanto Pepe Cobos, de El Pimpi, como los hermanos Jacobo y Fran Guerrero, de la firma Mi Colchón, están muy satisfechos con el paso dado para ayudar a estos niños, y ya están organizando la compra de cunas y otras necesidades que tienen en la misma zona. Por su parte, la Fundación Solidaria Luna Nueva sigue trabajando, además del contenedor enviado y que será recepcionado por los voluntarios que tienen allí, informó ayer la organización en un comunicado.