­Carmen Manzano, presidenta de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas, asegura que hay muchos frentes abiertos en la batalla por acabar con el maltrato y el abandono de animales domésticos. Por ejemplo, una medida que paliaría mucho la cifra de animales abandonados es la de obligar a los dueños de perros y gatos a esterilizarlos. «La esterilización debe ser obligatoria, porque ahora estamos otra vez recibiendo camadas de cachorros abandonados. La semana pasada tuvimos una de siete y otra de cinco. Tenemos una red de 150 casas y a los cachorros los mantenemos nosotros, con lo que vale mantener un lactante», señaló.

Ahora mismo, en el refugio de la Protectora hay entre 850 y 900 animales, principalmente perros y gatos, aunque la cifra va fluctuando según la época del año. Otras medidas que la Protectora está tratando de llevar a cabo son las siguientes: «Hemos solicitado que las tiendas de animales no puedan tenerlos en los escaparates. Lo ideal sería que no hubiera tiendas de animales, pero ese sería un paso. También consideramos básico tener un registro de maltratadores, de forma que quien abandone a un perro o un gato no pueda adoptar otro a las dos semanas. Para eso, tendríamos que dejar grabado en el registro su DNI y, en cuanto viniera a adoptar, se lo impediríamos. No puede ser que se abandonen animales que son viejos y a los dos días te lleves dos cachorros. Y, cómo no, que se controlen los criaderos ilegales, porque además de que una perra que pare muchas veces tiene problemas de salud supone una competencia ilegal para las perreras de cazadores porque no pagan impuestos, por eso habría que regularlos, hacerles numerosas inspecciones. Además, en esos sitios las condiciones de salubridad no son las mejores».

Incluso, solicita que se vigile la cría indiscriminada en estas perreras de cazadores. Lo cierto es que la principal arma contra el abandono de perros y gatos es la concienciación de la sociedad y desde los primeros niveles educativos, aunque aún queda una larga batalla por librar en este aspecto.