La asociación de vecinos Evolución de Campanillas colgó ayer en el balcón de su sede, en la calle José Calderón, la principal del barrio, una pancarta en la que denuncia que «el Ayuntamiento quita la piscina a Campanillas».
La pancarta hace referencia a la intención del Consistorio de demoler la piscina, en la calle Fausto, cerrada por la Gerencia de Urbanismo en 2013 aunque sin uso desde 2012, para construir en su lugar un rocódromo (sitio para escalada) con otros espacios de ocio.
El pasado 24 de octubre, la concejala de Deportes, Elisa Pérez de Siles, justificó en este diario la decisión «porque la infraestructura actual está afectada y no es posible usarla», en referencia al vaso de la piscina. También dijo que desde el punto de vista deportivo estos equipamientos deben ser rentables y además, ya existe en Colmenarejo una piscina municipal.
La asociación de vecinos cuestiona el mal estado del vaso y pide al Ayuntamiento que no deje al barrio sin un equipamiento que disfrutan desde tiempos del alcalde Pedro Aparicio.
