«Duermo con una máquina de la apnea, comencé a asfixiarme y me dije, qué pasa. No había luz y el equipo no estaba preparado para eso», recuerda Antonio Ayala, vecino de la calle Jábega. Fue algo que le sucedió en uno de los innumerables apagones y subidas de la tensión eléctrica que sufre la calle. En esa misma ocasión la avería le destrozó dos aires acondicionados.
En esta calle de las playas de Pedregalejo, calcula Francisco Reyes, otro vecino, «llevamos con este problema, lo menos 15 años». La última avería, el domingo 23 de octubre, «de 3 a 7 de la mañana», aunque como detalla, lo habitual es que los cortes de luz se produjeran «de viernes a domingo, todas las semanas, sobre todo el año pasado».
«Nos hemos llegado a tirar todo el invierno con la cena preparada a las 8 de la tarde porque se cortaba la luz y ya no venía hasta las 4 o 5 de la mañana», cuenta Loli Romero, que señala que en todos estos casos ha sido el seguro el que les ha arreglado electrodomésticos y aparatos como el lavavajillas o el ordenador. Esta vecina destaca que tenía una tienda y por culpa de estas averías sin fin se le estropearon varias cámaras frigoríficas. También su marido, que estuvo enfermo de cáncer, tuvo problemas mientras estuvo con una máquina que le ayudaba a respirar.
Los vecinos consultados se muestran frustrados por la escasa respuesta de Sevillana Endesa a este problema.
De hecho, Francisco Reyes muestra la respuesta de la compañía a la última queja por la avería del día 23 «y en la carta Endesa me dice que no tiene noticia de la última avería, cuando Loli y yo estuvimos hablando con el técnico que la reparó».
La falta de respuesta de Sevillana Endesa se traduce en que los vecinos suelen echar mano de los seguros del hogar para que les repare los electrodomésticos, pero como señala Antonio López Andújar, otro vecino afectado, «a ver qué se hace con las personas que no tienen medios, se les ha roto el frigorífico, la vitrocerámica y la antena de televisión, la factura es de 1.600 euros y no tienen con qué pagarla».
La sucesión de postes de madera y marañas de cables de calle Jábega, critican los vecinos, da una imagen muy mala y tiene mucho que ver con estas averías continuas. A este respecto, Antonio Ayala lamenta que algo similar suceda en la calle contigua, Cenacheros, «porque la arreglaron hace unos diez años, metieron los tubos para meter los cables de la luz, Sevillana no quiso meterlos, el Ayuntamiento no le obligó y está todo tercermundista».
Como recuerda Loli Romero, el técnico que reparó la última avería le comentó que la única solución «era levantar la calle».
A este respecto, Adolfo García, de la asociación de vecinos, recordó que hace dos semanas, ya pidió al director del distrito que el distrito Este «haga de intermediario con Endesa, no para resolver lo que tenga que pagar a los ciudadanos, que eso lo tendrán que ver los usuarios, sino por la necesidad de que el arreglo de la calle sea una infraestructura básica y hay que verlo todo». Adolfo García lamentó que en estos 15 días el distrito no haya respondido a la asociación y pidió la misma solución que para la vecina calle Pepote, en la que todos los cables se han soterrado. «Hay previsto un plan de mejora del barrio de la playa, que se marquen fases y se comience a hablar», reclamó.
El concejal del distrito Este, Julio Andrade, informó ayer de que Urbanismo arreglará en breve la calle Menita de la zona, y tendrá en cuenta para próximas actuaciones la calle Jábega.
