El grupo municipal socialista denunció ayer la presencia de mosquitos, ratas y malos olores en las zonas aledañas a la desembocadura del río Guadalmedina, según han informado a los ediles del PSOE vecinos de la zona, algo que el portavoz de la formación y candidato a la alcaldía, Daniel Pérez, achaca a la inacción del equipo de gobierno.

«Es hora de que el gobierno del PP deje de poner excusas, como ha estado haciendo durante todo este tiempo, asuma sus competencias y ponga en marcha el necesario plan anual para el mantenimiento de cauces y arroyos de la ciudad», dijo Pérez, quien afirmó al tiempo que, por desgracia, «vecinos y vecinas del entorno del Guadalmedina tienen que soportar diariamente la suciedad, los malos olores y constantes plagas de mosquitos y ratas, y todo ello tiene un máximo responsable en la figura del alcalde, Francisco de la Torre».

Según explicó, con su actuación tanto De la Torre como Teresa Porras «siguen sin acatar la sentencia del Tribunal Supremo de principios de año, un fallo que definía claramente que las competencias en materia de limpieza de cauces y arroyos en el término de Málaga son municipales, dando, por tanto, la razón a la Junta». «Es necesaria la ejecución de un plan anual de limpieza en los más de 90 arroyos que tiene nuestra ciudad para que estén en un perfecto estado y se eviten las riadas que se suceden periódicamente en Málaga por la falta de limpieza existente», arguyó, para insistir luego en la necesaria colaboración con la Policía Local a través de su unidad de Medio Ambiente (Grupona) con el fin «de controlar que se cumple la ordenanza municipal de residuos sólidos y se acaba con la maleza y restos de vegetación que invaden estos cauces». «Después de 20 años de gobierno del PP nos encontramos ante un equipo de gobierno sin rumbo y a la fuga y es hora de que el cambio llegue al Ayuntamiento, un cambio que debe venir de la mano del PSOE», dijo.

La edil socialista Begoña Medina recordó que el PSOE lleva años presentando iniciativas para el mantenimiento y la limpieza de cauces y arroyos, que han sido rechazadas por el PP al argumentar que las competencias eran de la Junta. «Una vez que la sentencia es firme, es el momento de que el equipo de gobierno actúe y ponga en marcha un plan de choque en los arroyos y cauces que transcurren por Málaga, en especial el del río Guadalmedina, en pleno corazón de la ciudad, que presenta una imagen deplorable», señaló.