Jesualdo Ferreira compareció en rueda de prensa resignado por la derrota, pero contento con el trabajo realizado por su equipo ante el Sevilla, al que calificó de un «buen equipo».
El portugués comentó que el choque había sido «equilibrado» y que el Málaga «empezó muy bien» el partido. «Creo que el resultado debería haber sido un empate. Los treinta primeros minutos fueron muy buenos y el equipo hizo todo lo posible por la victoria», añadió el luso.
Ferreira afirmó que el Málaga «ha progresado, tiene argumentos y dio todo lo que tenía ante el Sevilla, un gran equipo».
El técnico portugués destacó, además, que «la defensa es un trabajo de todos y la ausencia de Juanito obligó a situar a Apoño en una posición nueva».
Sobre la polémica sustitución del palmillero, que pareció enfadado cuando se fue al banquillo, Ferreira no quiso entrar a valorar su actitud y se limitó a decir que lo sustituyó porque lo había notado «fatigado» y necesitaba, en el tramo final del partido, «mayor presión y fuerza».
Antonio Álvarez, entrenador del Sevilla FC, aseguró que «una victoria siempre es bienvenida» tras matizar que el partido sirvió para que «los jugadores cojan confianza», lo que le suponía una doble felicidad «por ellos y por haber ganado en un campo difícil».
«No me he quitado ningún peso de encima. Estoy tranquilo con el trabajo que estamos haciendo, pero sí me alegro por los jugadores. Yo no estaba nervioso», aclaró el técnico sevillista.
Álvarez indicó sobre el partido que «el Málaga salió con empuje y, aunque el equipo lo tenía más o menos controlado, el gol llegó en un despiste». «Entre el esfuerzo de ellos y la confianza de nuestro juego llegó el empate y, luego, el segundo gol antes del descanso. En la segunda parte tuvimos el partido controlado y algunas ocasiones», remató el entrenador sevillista.
