La estrella ya existía, pero estaba deseando volver a brillar. Y es que Mounir El Hamdaoui, con sus 29 primaveras, no acaba de aterrizar en esto del fútbol. Pero sí es cierto que el holandés internacional con Marruecos ha renacido de sus cenizas para acaparar todos los focos mediáticos de la Liga española.

El atacante malaguista acaparó ayer portadas de periódicos, minutos radiofónicos e incluso robó protagonismo a las estrellas en los programas deportivos de la televisión. Su hat trick ante el Rayo Vallecano ha dado la vuelta al mundo futbolístico y todo el malaguismo lo ve ya como el nuevo ídolo en Martiricos, como el salvador en una campaña que se presuponía cargada de sinsabores.

Pero el caminar de El Hamdaoui no ha hecho nada más que comenzar e incluso el propio delantero se quiere dar un margen de tiempo para aclimatarse del todo al equipo y a la competición.

Ayer la plantilla malaguista no se ejercitó, pero a buen seguro que la felicidad del holandés era palpable casi a kilómetros de distancia. Si su actuación fue portentosa sobre el césped, sus números asombran más si caben. No sólo el «7» malaguista se erigió como el nuevo ídolo, sino que se rehabilitó de golpe y porrazo para el fútbol. Y es que Mounir marcó ayer en sólo 82 minutos los mismos goles oficiales que en los dos últimos años. Su carrera había tomado una espiral complicada llena de nubarrones. Primero en el Ajax, donde su conflicto con Frank de Boer le apartó del primer equipo. Y luego en la Fiorentina, donde su adaptación al fútbol italiano no llegó a producirse y acabó diluyéndose en el banquillo y la grada del conjunto viola.

En el Calcio jugó 20 partidos -uno de Copa-, pero sólo tres lo hizo desde el inicio. La confianza de Vincenzo Montella en él fue nula y por eso sólo sumó tres tantos en 661 minutos de juego. Este verano salió por falta de oportunidades, pero curiosamente la portentosa actuación de El Hamdaoui coincidió con la grave lesión de Mario Gómez en la Fiorentina que le podría tener apartado de los terrenos de juego dos meses.

Ahora, sin embargo, ha encontrado la confianza de Bernd Schuster y tras debutar en el Sánchez Pizjuán, agarró la titularidad contra el Rayo con la fuerza y la confianza de un jugador que quiere rehabilitarse para la causa.

Sus tres goles son el debut en Martiricos más estelar que se recuerda. Recientemente se recuerda el estreno de Saviola el curso pasado, que marcó en su primer partido. O de Fabrice en Vigo, que también se estrenó en la primera aparición con la elástica del Málaga. También Pedro Morales, en su primer partido de titular, marcó un gol y asistió otros dos en Vallecas. Pero nada comparable a lo de El Hamdaoui.

El atacante habló tras el partido y mostró su alegría por los tres goles. Algo que quedó reflejado también en la zona mixta, donde se paseó con el balón del partido firmado por todos sus compañeros. Un trofeo que puede unir a sus otros tres hat tricks cosechados en Holanda con el AZ Alkmaar.