Francisco Portillo se ha convertido en las últimas fechas en un objeto de deseo para varios clubes de Primera e incluso de Segunda División. El talentoso centrocampista malagueño tiene mercado, pese a que suma casi media temporada en el ostracismo, y el último club que se ha interesado por sus servicios para este mercado invernal es el Real Betis, que milita en Segunda División pero que con la llegada de Pepe Mel al banquillo quiere emprender su camino de vuelta a Primera División.

Por el momento es sólo un interés llegado desde tierras sevillanas, pero el nombre ya se ha filtrado. Portillo gusta en Heliópolis y sobre todo al técnico madrileño del Betis. Su calidad, su capacidad de asociación e incluso su perfil trabajador y de jugador de club convencen en el conjunto verdiblanco, que no es un club más de Segunda y sí de los llamados «grandes».

El interés del Betis se uniría así al que también hay en Granada y en Getafe, ambos de Primera, por hacerse con Portillo. Unos contactos que ya se habrían producido para intentar sacar al jugador de ser uno de los últimos en la rotación del Málaga y cargarlo de protagonismo lejos de la Costa del Sol. Portillo, en ese sentido, tiene el espejo de Recio, que se marchó año y medio a Granada y ha regresado más maduro y siendo uno de los habituales en los planes de Gracia.

Desde luego, y tras ver el poco protagonismo que el jugador está teniendo en el Málaga, donde sólo ha jugado dos partidos oficiales, ambos de Copa del Rey, salir en enero es una buena opción para Portillo. La busca de minutos para un jugador aún joven como él se antoja necesaria. Pero no todo es facilidad.

Pese a sus escasas apariciones, la relación entre técnico y jugador es cordial. E incluso sería el propio entrenador el que ahora, a tenor de los últimos acontecimientos y en previsión a los movimientos que podría sufrir la plantilla en fechas venideras, prefiere frenar su salida. Y es que la predisposición que el club mostraba con Portillo en verano para que saliera, parece haber cambiado.

Desde luego, si hay alguna opción de que Portillo salga es en calidad de cedido, ya que no se contempla la venta del jugador. Ni siquiera añadir una opción de compra en su cesión. Y es que a Portillo le queda año y medio de contrato en Málaga, pero se sigue pensando en él como jugador de peso, aunque haya perdido protagonismo en la rotación este año.

El mercado, no en vano, no se detiene y hoy está previsto que se haga oficial la cesión de Pablo Pérez a Boca Juniors, una vez que el presidente del conjunto «xenize» haya firmado los contratos y hayan sido remitidos al Málaga. La salida de Pablo Pérez es un escollo menos para Portillo, en caso de que siga de blanquiazul, aunque su agente, Manuel García Quilón, también intenta buscar alternativas para que pueda salir.

El que llega hoy de tierras inglesas es Mario Husillos. El director deportivo ha estado varios días en Inglaterra viendo fútbol y negociando con jugadores. Por el momento no ha trascendido ninguna operación que se haya puesto en marcha, pero el club tiene la prioridad de firmar a un defensa por las bajas del plantel.