Acompañó la climatología, que no vomitó el agua que estaba prevista ni en los prolegómenos ni durante el partido ante el CD Leganés, y La Rosaleda pudo ser agasajada como se merece, rememorando su 75 cumpleaños. Miles de trozos de tarta, por cortesía del Obrador de Confitería Tejeros, cientos de globos blanquiazules con el escudo del Málaga, honores para los veteranos y foto de familia en los prolegómenos del encuentro.

El Málaga, a través de su Fundación, quiso que la hinchada malaguista pudiera celebrar el 75 aniversario del estadio de Martiricos, que ha visto tantas tardes de gloria y también de decepciones. Ascensos, desapariciones, ascensos, de Tercera a Primera, Intertoto, UEFA, Champions League... Una verdadera montaña rusa que hoy se festejó por todo lo alto, con la complicidad de club y aficionados.

Hubo bufandas de regalo en la tienda oficial del club por la compra de la camiseta de la temporada, con un guiño para los abuelos. Y para honrar la memoria malaguista, 11 mayores -incluidos veteranos del CD Málaga- también saltaron al campo con el equipo. Ben Barek, Antonio Benítez o Bernardi recordaron la historia del club sobre el césped.

El tiempo, además, acompañó. A la entrada del estadio, los cientos de voluntarios repartieron un trocito de tarta con una servilleta azul para endulzar la tarde. Los pequeños se llevaron también algún globo. Y la gran familia blanquiazul vio a sus veteranos y a otros personajes fotografiarse solos y con el equipo titular de Juande Ramos por La Rosaleda en su 75 aniversario. Una gran fiesta en los prolegómenos del Málaga CF-CD Leganés, aunque con poco público. La previsión de lluvia hizo que no acudieran al estadio ni 20.000 espectadores.

En torno al minuto 75, el estadio cantó a capela el cumpleaños feliz a La Rosaleda, con las linternas de los móviles recreando las velas de una tarta.