Las medidas que garantizan la seguridad en el interior de los juzgados marbellíes no son especialmente sofisticadas. En las últimas semanas y tras los últimos robos detectados en el edificio , la Junta de Andalucía se ha limitado a cambiar las cerraduras de las puertas y a instalar rejas en algunas de las ventanas que son perfectamente visibles y accesibles desde el exterior.

«Estamos pendientes de que se refuercen los sistemas de vigilancia», adelantó a este diario el juez decano de Marbella, Ángel Sánchez. La principal demanda es que el horario de control se amplíe y se prolongue durante las 24 horas. En la actualidad, tan sólo funciona 12.

El número de cámaras de seguridad también aumentará. Al menos, si se cumple la petición de los magistrados y demás trabajadores de la sede judicial de la avenida Mayorazgo, donde se concentran los juzgados de instrucción y la fiscalía. «Es el edificio donde se concentran quizá los asuntos de mayor trascendencia», recordó Sánchez.

Asalto repetido

Los pasados 26 y 27 de marzo, unos asaltantes burlaron los sistemas de seguridad y lograron introducirse en el inmueble. «No hemos echado en falta ningún material comprometido», tranquilizó el juez decano. No obstante, «no deja de ser un aviso», puntualizó.

Los intrusos se llevaron la recaudación de dos máquinas de café e hicieron una hoguera con lápices y cojines en el interior. Un acto vandálico que la policía achacó inicialmente a una banda de vándalos procedentes, probablemente, de la misma barriada. Aún no ha habido detenciones.

El juez decano de Marbella lamentó la falta de una mayor seguridad en los juzgados, donde se concentra tanta información confidencial y delicada en algunos casos particulares.

El subdelegado del Gobierno en Málaga, Hilario López Luna, se comprometió a atender las demandas de los jueces y fiscales acerca de este asunto. Pero la implantación de las nuevas medidas de seguridad, más rigurosas, va más lenta de lo que parece que debiera.

Una única sede judicial en el aire

La unificación de las tres sedes judiciales que tiene Marbella en la actualidad es un tema recurrente que se mantiene en el aire. A pesar de que se va a cumplir el primer año desde que el nuevo planeamiento entró en vigor, todavía no está reservada la parcela sobre la que se construirá esta instalación.

La Junta de Andalucía tampoco reserva ninguna partida presupuestaria para la creación de la demandada ciudad de la justicia marbellí. Las administraciones local y autonómica no han pactado el enclave en el que situar este nuevo equipamiento público.

Hasta el momento, se mantienen los edificios que hacen las veces de sedes en la calle Doha, la avenida El Mayorazgo y la avenida Arias de Velasco.

La fuerte crisis económica ha obligado al Gobierno autonómico a recurrir a la fórmula de financiación público-privada con la que últimamente construye la mayoría de sus actuaciones.

La unificación de las sedes judiciales mejoraría la operatividad de los trabajadores que, en algunos casos, se ven obligados a desplazarse de una a otra para mover documentación y gestionar trámites.

El nuevo palacio de justicia terminaría, por tanto, con la dispersión que sufren los trabajadores de dicha administración.