Izquierda Unida denunció ayer ante la Fiscalía de Málaga presuntas irregularidades en el proceso de prórroga hasta 2065 de la concesión de agua de Torremolinos a la empresa de agua y saneamiento torremolinense (Astosam) y la posterior adjudicación del 95% de sus acciones a la empresa Aquagest Sur SA.

El portavoz de IU en Torremolinos, Félix Martín, explicó que el alcalde Pedro Fernández Montes negoció la adjudicación a Aquagest del 95% de las acciones de Astosam, por un importe de 17 millones de euros, dos meses antes de que la Junta de Gobierno aprobara el pliego de condiciones y se abriera el procedimiento.

Además, dijo que el alcalde ya tenía como objetivo vender el patrimonio a Aquagest desde que acordó extender la gestión a 25 años más en enero de 2009.

Martín, el coordinador provincial de IU, José Antonio Castro, y el responsable provincial de Política Municipal e Institucional, Manuel García Peláez, entregaron ayer numerosa documentación a través de la cual pretenden demostrar que todo fue una estrategia para conseguir y favorecer primero, la ampliación del plazo de concesión demanial por 25 años más, y, segundo, para adjudicar el 95% de Astosam a Aquagest sin posibilidad de que otra empresa pudiera hacerlo.

José Antonio Castro detalló que "el alcalde abonó el terreno para que, al margen de las competencias lógicas de los órganos municipales, se consiguiera la prórroga y el paso de la mayoría accionarial", y denunció que la situación "es el clásico modelo de gestión que hacía Jesús Gil y compañía". Además incidió en que los torremolinenses pagarán las consecuencias, pues el dinero de la venta fue directo a las arcas del Ayuntamiento, y será la empresa privada la que tendrá que cobrar el gasto subiendo el recibo.

En el último pleno, el alcalde Pedro Fernández Montes, afirmó que todo es legal y que han tenido que vender el 95% de acciones por el descenso de los ingresos de las haciendas locales.