Se hacen llamar Asociación Pro Tradiciones Malagueñas La Coracha. Realmente parece una peña de la zona Este con personas mayores de poderío caduco. Y tienen a bien -mal- hacer cada año una exaltación a la mantilla para defender su uso y fomentarlo. Es curioso que defiendan algo que, por desgracia, hace décadas que se dejó de estilar por aquí. Dentro de su ´top mantilla´ ha estado la baronesa Thyssen y este año han decidido que sea Carmen Lomana la pregonera del asunto. Nadie se está cebando porque son personas mayores, pero resulta patético que Málaga permita este tipo de asuntos tan lamentables que acaban dando la razón a Antonio Burgos cuando desprecia nuestra Semana Santa. Es ridículo que una asociación que dice defender las tradiciones llame a esa señora para defender la mantilla en Málaga. No se entiende que nadie ponga el grito en el cielo. Salvo que en ese nicho de dinosaurios haya alguien con poderío y buenos contactos. Con los buenos paseos marítimos que hay, bien podrían dedicarse a andar y dejar de defender cosas, porque el resultado es bastante negativo.

Y aún queda por saber qué pretende anunciar una hermandad cuando saca un cartel si no tiene nada nuevo ni especial que mostrar. Se comprende un pasquín por una extraordinaria, en caso de grandes estrenos o si está empezando. Pero de ninguna manera tienen lógica los ´shows´ de las hermandades en Cuaresma para presentar verdaderas porquerías. Y seguidamente de enseñar el monstruo tienen la manía de hacer un pregón. Y llevan razón porque son para pregonarlos por tal magna birria. La Virgen con los ojos gigantes, el Cristo a cachos y los retoques fantasía para que una lágrima brille hacen de todo esto un circo infumable.

A los Hermanos Caballero el apellido les viene largo. Han pegado un patinazo de los grandes. La previsión es clave y han topado con gente formal y noble que ha confiado su mayor tesoro a su taller. Toca esperar. Esperar al Miércoles Santo para volver a ver a La Paloma en la calle -que es lo importante-. Aunque vaya en un carromato es bonita. Tomen nota de cómo se las gasta el taller para futuros encargos. La cofradía ha gestionado la crisis con brillantez y elegancia. Los tronos se sacan terminados. Para sacar cosas sin terminar ya tenemos a? en fin.

Viva Jerusalén.