El Unicaja vive, por fin, momentos dulces. «Hemos pasado dos meses malísimos, sufriendo muchísimo, porque este club y esta entidad tiene que estar mucho más arriba», confesaba ayer Manolo Rubia, director deportivo del club, que sólo tiene ojos para la Liga ACB en la previa del choque frente al CSKA Moscú. «Tenemos un partido importantísimo en Murcia, que nos pondría 14-12, y que marcará nuestra trayectoria en el resto de la temporada», analizó ayer en Radio Marca.

El Unicaja atraviesa por su mejor racha, con nueve triunfos en los once últimos encuentros. Y a pesar de tener tan cerca el play off y a un par de victorias al sexto clasificado, Rubia prefiere no especular. «Yo firmo ahora mismo ser octavo en la ACB. Si podemos ser séptimos mucho mejor, porque te evitarías al Real Madrid, pero firmo ser octavo», insistió. « Es muy importante la Euroliga pero lo es mucho más la ACB, para el club y la entidad», subrayó.

La clave del cambio en la dinámica del equipo es, según Rubia, que Repesa ha dejado de leer en la prensa dudas sobre su futuro. «El entrenador está tranquilo, le hemos dejado en paz, me incluyo yo. Se ha centrado en su trabajo. No se sentía seguro, no porque no se lo hayamos transmitido, sino porque las noticias que leía le afectaban. Cuando él se siente fuerte y su autoridad es fuerte, y la plantilla lo ha sentido así, hemos visto otro equipo. Espero que esté con nosotros no sólo ésta, sino también las próximas temporadas».

Y contó un «secreto de alcoba». «Cuando jugamos en Berlín, en una cena, el presidente reunió a todo el equipo, con los técnicos, para mostrarle la confianza a nuestro entrenador. Y el presidente les dijo a todos que éste era nuestro entrenador y que por favor tratarán de cambiar la dinámica. Nuestra racha es para ser muy positivos con este proyecto. Nos hemos recuperado. De este equipo se esperaba más. Hemos pasado una mala racha. Vuelvo a cruzar los dedos, espero ganar en Murcia», dijo.

@Falimguerra