Marzo será un mes de mucho baloncesto en el Martín Carpena. La afición verde, desde luego, está de enhorabuena. De los 9 partidos que tiene por delante este mes el equipo de Joan Plaza, nada menos que ¡¡7!! serán en el Palacio. Por Málaga pasarán el Gipuzkoa, el Joventut, el Laboral Kutxa de Lamar Odom, el Efes turco, el Olympiacos griego... y dos veces el Barcelona, una en partido de Top 16 continental y otra, esta misma mañana, en choque de la Liga Endesa.

Y ¡vaya partidito! el de hoy. Porque Unicaja y Barcelona se juegan esta mañana de domingo nada menos que la tercera plaza de la Liga. Por delante hay 40 minutos para que el Unicaja intente buscar un premio que, seguramente, no era un objetivo al empezar la temporada, pero que ahora está al alcance de la mano en este esprint final de la primera fase de la temporada.

Y es que si el equipo verde gana hoy al Barcelona, sumará un triunfo más en la clasificación que los blaugranas y, además, tendrá a favor el average, por su victoria de la primera vuelta en el Palau Blaugrana. Es verdad que todavía quedarán 13 jornadas más, pero...

La cita tiene todos los alicientes. El Barcelona llega al choque con una sola derrota en las seis últimas jornadas ligueras y el equipo de Los Guindos suma tres victorias consecutivas con lo que ambos equipos quieren mantener su racha y seguir a la estela del Valencia, segundo clasificado, y ahora a tres victorias de ambos.

La mejor noticia para Plaza es que Fran Vázquez se entrenó ayer y, salvo sorpresa, se vestirá esta mañana. El pívot gallego se perdió la victoria en el Buesa Arena por un esguince de tobillo, pero el dolor y la inflamación han remitido y podrá estar ante su exequipo. Con el gallego, habrá una rotación más en el juego interior, muy necesaria ante el potencial que presenta el Barça en la pintura. Sergi Vidal y Rafa Hettsheimeir seguirán, eso sí, siendo bajas.

Después del tira y afloja entre Plaza y el club por no fichar un temporero, el equipo deberá otra vez sumar esfuerzos para competir contra una de las mejores plantillas de toda Europa. No será extraño otra vez que Suárez tenga puntualmente que echar una mano dentro, igual que el jueves en Vitoria, aunque los culés tienen muchos más kilos y versatilidad ahí dentro que el Laboral Kutxa.

Xavi Pascual llega a Málaga con menos problemas en su enfermería. La única baja será la del pívot polaco Maciej Lampe, que viajó a Estambul entre semana para el partido frente al Efes, pero que no parece estar aún a punto para jugar. Además de esta ausencia, el único inconveniente es el del alero griego Kostas Papanikolau, quien seguirá jugando con su máscara de protección facial a causa de la fractura nasal que sufrió en Vitoria hace nueve días.

El resto de la plantilla está a disposición del técnico azulgrana, incluidos Juan Carlos Navarro, que parece estar en el mejor momento de la temporada, después de su buen partido en la capital otomana, y Ante Tomic, que sumó 26 puntos, 15 rebotes y 3 asistencias para lograr 40 de valoración y ser MVP de la Euroliga por segunda semana consecutiva.

Pero el nombre propio del Barça para la afición verde será, por segunda temporada consecutiva, el de Álex Abrines. La fuga del canterano hace un par de veranos no la ha perdonado la grada del Carpena, que la tomó con él en la pasada Copa del Rey cada vez que tocó el balón. Hoy, seguro, volverá a ser el foco principal de toda la ira de una «marea verde» que no entendió aquella «espantá».

Los números hablan de que será un partido igualado. Y no solo por el 1-1 hasta ahora esta temporada, tras el triunfo cajista en Liga y el del Barça en la Euroliga -ambos en el Palau-. Las estadísticas de los dos equipos son muy parejas, ya que Unicaja es el cuarto ataque de la liga (79,3 puntos de media) y el Barcelona, el sexto (78,7). En defensa, los azulgrana son la segunda mejor de la competición, con 70,3 puntos encajados, y los de Joan Plaza, la sexta, con 73,1 puntos de media.

En definitiva, que huele a partidazo. A día grande de básket en el Palacio. La pasada temporada, cuando peor tenía las cosas el Unicaja de Jasmin Repesa, el Barcelona mordió el polvo en el Carpena. Llevaba cinco visitas seguidas a Málaga ganando el equipo culé. Pero un triple estratosférico, a tres segundos del final, de Marcus Williams obró el milagro (71-69), junto a un taponazo de Fran Vázquez a Pete Mickeal, en el intento desesperado del Barça por empatar sobre la misma bocina.