­La guerra en el baloncesto europeo ya ha comenzado. Pero el Unicaja, por el momento, ha decidido guardar una posición neutral y no desea alistarse con ninguno de los dos movimientos. Es muy consciente de que ha sido «excluido» de la Euroliga y oye los cantos de sirena de la FIBA. El presidente, Eduardo García, asistió junto al gerente, Ángel Bordes, a una reunión en Barcelona esta semana con los 11 equipos con Licencia A y otros 16 de toda Europa, que disputan Euroliga y Eurocup, convocado por Jordi Bertomeu. Allí supo que la Liga ACB no tendrá acceso directo a la nueva Euroliga y que la competición sólo le abrirá sus puertas a los campeones de la VTB League y la Liga Adriática. Cursará una wild card a Bayern Munich. O, quizá, a Darussafaka Dogus.

El club está realmente defraudado con la Euroliga, cuya promesa de potenciar la Eurocup no le satisface. Hace ya tiempo que el consejo de administración del club adoptó la decisión de escuchar abiertamente a la FIBA. El Unicaja ha tenido contactos con el organismo y ha recibido numerosa documentación de su propuesta para crear la «Basketball Champions League». El torneo tendrá 32 equipos y la ACB tendrá dos plazas. Además, la FIBA se guarda hasta cuatro invitaciones.

El organismo, tras convencer a las Federaciones de Italia, Francia y Turquía, ha pasado a la acción y ha comenzado a llamar a las puertas directamente de los clubes. El próximo lunes, día 8 de febrero, les ha citado en Munich, en una reunión para darles a conocer su competición. El Unicaja ya la tiene. Sin embargo, y a pesar de que en Los Guindos gusta la idea de la FIBA tras el plantón de la Euroliga, la decisión actual es la de no acudir a Alemania. La entidad, siempre prudente en sus movimientos, no desea que se relacione directamente con la FIBA. No quiere aparecer en esa foto de familia. A día de hoy, el club no piensa acudir. El Unicaja ya sabe de primera mano el modelo de «Champions», y es que el presidente de FIBA Europa, Turgay Demirel, sabedor del potencial del club y de su larga historia y tradición, quiere reclutar al equipo malagueño, que daría lustre a la competición, que se presentará en París el próximo 20 de marzo.

El Unicaja no tomará ninguna decisión en firme sobre su futuro continental hasta junio, una vez que concluya la temporada y todo esté mucho más aclarado.