La indudable mejoría que ha experimentado el Unicaja en las últimas semanas vivió su culmen el domingo por la noche, cuando el Martín Carpena rompió en gritos de alegría y festejos por el triunfo, en la prórroga, ante el FC Barcelona. Ganarle al Barça, desde aquella final de 1994/95, siempre es «diferente». El Unicaja disputó uno de sus mejores partidos del curso para mandar a la lona al gigante culé. El equipo ha mostrado ser más sólido y es, cada partido, más consistente. Ante el Barça se consolidó la figura de Kyle Fogg y hubo lluvia de elogios para Alberto Díaz. Aparecieron jugadores que han estado escondidos como Adam Waczynski o Hamady N’Diaye, y el equipo unió cuatro triunfos consecutivos. Ahora ya es quinto en la Liga Endesa y tiene a tiro de piedra la clasificación para la Copa del Rey. Esta gran victoria ante el Barça ha de servir para consolidar el proyecto y dar el espaldarazo definitivo hacia la estabilidad.
Un triunfo inolvidable | Una de esas grandes noches que ya forman parte de la historia
El Unicaja-FC Barcelona del domingo en el Martín Carpena no ha reportado al Unicaja ningún título, ninguna clasificación para la Copa o los play off de la ACB o el pase a la Final Four. Sin embargo, la victoria y ese encuentro forman ya parte de la historia del club, porque fue uno de esos partidos magníficos que se recuerdan durante mucho tiempo. Hemos vivido en los últimos años partidos de esa índole: el triple de McIntyre al Real Madrid, las victorias en casa a Madrid o Barça en los últimos play off... Son partidos diferentes que se guardan en el recuerdo.
Y el Unicaja-Barça de la décima jornada de la ACB entra de lleno en el cajón de la memoria de la afición. Por cómo se ganó, por la prórroga, por los tiros libres, por el enfado de Bartzokas... Y, muy especialmente, porque tras el triunfo flotaba la sensación de que esa victoria representaba el comienzo de algo. Que no era uno más. Si no que desde esta victoria se puede construir con solidez y se debe edificar. El Unicaja es cada día más fuerte, sufre menos bajones en su juego. Llegarán, seguro algunos partidos irregulares. Pero parece que Joan Plaza y el equipo ya han dado ese pasito al frente tan necesario para ser más competitivos.
Kyle Fogg | El nacimiento de un anotador
Kyle Fogg llegó a Málaga con el cartel de metedor compulsivo. Había sido el máximo anotador de la Liga de Alemania. Y auna unas condiciones técnicas y físicas que denotan, a la legua, que es un escolta anotador, un jugador que se crea sus tiros y que suma con una facilidad pasmosa. A Fogg le ha costado dos meses entrar en la pizarra de Plaza. Y, cuando lo ha hecho, ha sido por la desgraciada lesión de Nemanja Nedovic. Plaza, que contaba (cuenta) con él como un base, le recolocó en el «dos». La ausencia de Jamar Smith por el nacimiento de su hija ante el Buducnost hizo que Fogg se destapara con 31 puntos. Frente al Barcelona aportó 29 más, con 12 faltas recibidas. Ha sido incluido en el cinco de la semana de la ACB y es el cuarto jugador en la historia que ha metido 20 tiros libres en un partido. En un par de semanas ha pasado de ser el último jugador de Plaza en la rotación exterior a ser el líder en anotación del equipo.
Alberto Díaz | Defensa, trabajo, compromiso y amor a un escudo
«¡Alberto, Alberto!», coreaba el Carpena cuando Plaza sustituyó a Alberto Díaz. El base formado en Los Guindos ha demostrado que, con pasión, entrega, disciplina y trabajo se puede llegar muy alto. El base malagueño es un currante y eso le ha llevado a convertirse en el base más sólido del equipo. Su exhibición defensiva ante el Barça fue descomunal. Koponen soñará varios días con él. Robó, dificultó líneas de pase y puso en pie el Carpena, ávido de que niños de la cantera vuelvan al escaparate. Lo más meritorio es que el pelirrojo es ya el tercer mejor triplista, en porcentaje de acierto, de toda la ACB. Díaz promedia el 54,5% (12 de 22 triples), sólo por detrás de Shayne Whittington (55,5%) y Rafa Martínez (55%). Un crack.
Más gente al carro | Waczynski y N’Diaye por fin brillaron en Málaga
El Unicaja ha estado sujeto en este arranque de temporada por Carlos Suárez. El madrileño se ha convertido en el corazón del equipo. El «capi» ha tirado del Unicaja, con la ayuda de Dejan Musli por dentro y de Alberto y Jamar Smith por fuera. Hubo buenos partidos de Dani Díez o de Jeff Brooks. Y de Nedovic, cuando estuvo sano. Y se echaba de menos que otros actores tuvieran un papel más protagonista, que se involucraran. El domingo hubo dos que lo hicieron: Waczynski y N’Diaye. Cada uno, a su manera. El polaco firmó su mejor partido como cajista, estuvo presente en defensa y en ataque, aportó 12 puntos y, aunque no estuvo acertado en el tiro, fue muy participativo. También el senegalés N’Diaye se creció en un partido «grande». El africano entendió bien el partido y no cometió precipitaciones ni faltas tontas. Puso tres tapones estratosféricos y supo cubrir los descansos de Musli. Quien sigue muy perdido y urge recuperar es Oliver Lafayette.
El Carpena, on fire | El Carpena registra la mejor entrada de la temporada
Al Palacio habían ido de media esta temporada en la ACB sólo 6.973 personas. Ante el Barça acudieron 9.154 espectadores, lo que supone la mejor asistencia del curso. En el Unicaja-Tecnyconta Zaragoza vieron al equipo 6.768 espectadores, lo que representó el peor debut del equipo malagueño en casa. La cifra se incrementó en los siguientes partidos de ACB, con 7.068 ante el Gran Canaria y 7.461 contra el Baskonia, aunque frente al Bilbao se vivió la más baja de la ACB en este curso, con 6.596. Con el Barça se superan los 9.000. Ningún otro pabellón español llevó más gente este fin de semana que el Palacio.
Quinto en la ACB | La mejor clasificación del curso
La victoria ante el FC Barcelona ha permitido al Unicaja alcanzar la quinta plaza liguera, su mejor clasificación en lo que va de temporada. Los verdes suman ahora seis victorias y tres derrotas, mismo balance que Valencia (4º), Bilbao Basket (6º) y Morabanc Andorra (7º). También tiene seis victorias, pero con un partido más el Baskonia, que es octavo.
Muy cerca de la Copa | Dos o tres victorias más
Volver a la Copa del Rey, tras el fracaso que supuso no acudir la pasada temporada, es el segundo objetivo del Unicaja, tras haber cumplido ya el primero: estar en el Top 16 de la Eurocup. La historia dice que, en una Liga con 17 equipo, se necesitan entre ocho y nueve victorias para estar entre los ocho mejores al final de la primera vuelta. El Unicaja suma ya seis triunfos y faltan aún seis partidos más (Manresa, Valencia, Estudiantes, Andorra, Obradoiro y Real Betis Energía Plus). Ganar dos o tres le meterían en la Copa del Rey.
Cuatro triunfos seguidos | Iguala la mejor racha del curso
El Unicaja ha ganado sus cuatro últimos partidos, igualando el mejor registro de este mismo curso, algo que no hacía desde hace ya dos años. El equipo ha ganado de forma consecutiva a Zenit (93-86), Bilbao (85-64), Buducnost (93-75) y FC Barcelona (95-89). Se da la circunstancia de que el equipo ha jugado cuatro partidos consecutivos en casa y ha salvado todos con victoria. Esta misma campaña ya repitió estas mimas cuatro victorias, al ganar a Fuenlabrada (85-98), Herbalife Gran Canaria (89-78), Buducnost (62-86) y Tenerife (72-73).
Nedovic, muy pronto | El serbio ya se entrena y podrá jugar en una o dos semanas
No hay fechas de reaparición ni el club se quiere precipitar, pero la vuelta de Nemanja Nedovic al equipo está cada día más cerca. El escolta, lesionado el pasado 15 de octubre ante el Gran Canaria, ya se entrena con el resto del equipo. Se espera que en una o dos semanas pueda vestirse de corto y volver a jugar. Aún no está a su mejor nivel y debe recuperar sensaciones. Cuando lo haga, en un plazo de una o dos semanas, reaparecerá.
Ahora, la Eurocup | El liderato, próximo reto para tener un Top 16 menos complejo
El Unicaja cerró la pasada semana su clasificación para el Top 16 de la Eurocup. No fue una tarea demasiado compleja, puesto que la reducción del torneo ha provocado que cuatro de los cinco equipos accedan a la siguiente fase. Ahora se trata de dar un paso más y tratar de quedar lo más arriba posible. Porque el liderato del Grupo C provocaría que el Unicaja evitase, en el Top 16, a todos los campeones de su grupo -a día de hoy a Valencia, Khimki y Gran Canaria-. El reto comienza mañana en Múnich. Aquí el Bayern ganó por 62-74. Así que toca ganar. Y si se hace por 9 puntos, pues mejor.
