Levántense hoy a buena hora, hagan algo de deporte, que hoy el viento amaina, den un paseo en bici o a paso ligero, bajen luego los churritos con una cerveza fresquita y cuidado con la siesta, vaya a ser que se queden sopa y no estén alerta para las cinco. No hagan planes para esa hora. Ni se les ocurra. Dejen la visita a la suegra para el próximo domingo. O el cine. O la limpieza del garaje. O de los armarios. Porque a esa hora, hay espectáculo en la tele, en Barcelona. Porque juega el Unicaja. Y eso, amigos, es sinónimo de diversión. Cuando el Unicaja salta a la pista, de un tiempo a esta parte, uno agradece ir al Carpena. O pegarse un rato a la tele. O al ordenador, que en la web de La Opinión le contamos, cuarto a cuarto, lo que pase esta tarde en el Palau Blaugrana entre el FC Barcelona Lassa y el Unicaja. Un partidazo con el equipo más en forma de la Liga en liza.

Y no, la escuadra más en forma no es la del Barça. Ya quisieran ellos. Es la que viste de verde (hoy de blanco). Es la del Unicaja. Eso, por supuesto, no quiere decir que hoy el Barcelona recupere su mejor versión y pueda ganar el partido. Esto es deporte, es baloncesto, y los culés tienen un señor equipo. Tienen historia, plantilla y muchas fórmulas para crearte problemas en la pista. Lo de la Copa del Rey seguro que está fresco aún en la mente de los costasoleños. Pero si el Unicaja es el Unicaja que estamos viendo en las últimas semanas, habrá diversión, espectáculo y, probablemente, saltará la sorpresa en el feudo catalán.

Llega el Unicaja con cinco triunfos consecutivos. Los dos contra el Valencia que dieron el título de la Eurocup, más los envites ligueros en Santiago de Compostela y en el Carpena ante Morabanc Andorra e Iberostar Tenerife. O sea, cinco triunfo de los que cuatro han sido ante rivales de puestos de play off. Que son, precisamente, los que se dirimen hoy en el Palau.

Y es que el Unicaja es el quinto en la clasificación, con un balance de 18 triunfos y 9 derrotas, idéntica a la de los azulgranas, que son sextos, con esos guarismos. Ambos se encuentran a una victoria de la tercera plaza (Baskonia) y de la cuarta (Iberostar Tenerife, que ha jugado un partido más), y a dos del coliderato que comparten el Real Madrid y el Valencia Basket. Y, ojito, porque esta jornada el calendario también ha emparejado a vitoriano e insulares, aunque el choque, debido a la disputa de los play off de cuartos de final de la Euroliga, se ha aplazado para la primera semana del mes de mayo. O sea, que el ganador del Barça-Unicaja asaltará el cuarto puesto.

Y ése es un botín golosísimo. Tendría, el ganador, un play off con factor pista a su favor en cuartos de final. Algo importante, aunque demostrara el cuadro de Joan Plaza que no lo sea tanto, en su demostración en la Eurocup. Ahora se trata de exportar ese buen momento de juego, vivido en el éxito europeo y en los últimos encuentros de la ACB, al Palau. A una de las pistas más complicadas de la Liga. Donde el Unicaja viaja con fe, con ilusión y esperanzas. Y con toda la plantilla disponible. Tras la recuperación de Dejan Musli, los malagueños están al completo. Una excelente noticia para afrontar la recta final de curso. Más, para medirse a un Barça realmente herido, en crisis de identidad, y que es un gigante dormido.

Porque los de Georgios Bartzokas, en cambio, llegarán a la cita en un momento de baja forma, tras la derrota cosechada en la pasada jornada en La Fonteta (76-59), que les dejó un triunfo por debajo de la parte alta. En ese partido, se volvió a vislumbrar la baja capacidad productiva de los blaugrana, que no llegaron a superar los 16 puntos en ninguno de los cuatro cuartos del partido. Hoy se enfrentarán el quinto y sexto mejor ataque, aunque en esta faceta, a diferencia de lo que ocurre en la clasificación de la Liga Regular, los culés están por delante (82,31 puntos de media frente a los 82 del Unicaja).

En Valencia no jugaron el escolta Juan Carlos Navarro y el ala-pívot Dustin Doellman, que podrían volver tras recuperarse de sus respectivas lesiones, ni tampoco el pívot Vítor Faverani, aun convaleciente de la inflamación que arrastra en la rodilla desde hace tres semanas. A ellos se unen los dos lesionados de larga duración, Pau Ribas y Shane Lawal.

Hoy es un gran día. Juega el Unicaja. Y este equipo está de dulce. Lo dicho: ¡¡¡no se lo pierdan!!!