El Unicaja se despidió de la Copa del Rey sin tiempo para disfrutarla. El sorteo le emparejó con el rival que todos querían evitar. El Real Madrid era favorito ayer, como lo será mañana, en semifinales, y en una hipotética final, el domingo. Una pena, sobre todo para los 200 aficionados cajistas que se quedaron sin el premio de la victoria.