Los padres de la guardería Virgen del Carmen, de Torre del Mar, siguen en pie de guerra contra la empresa de catering que se encarga de servir los menús que comen sus pequeños en el comedor. Aseguran que es tanta la ansiedad que les provoca tener que comer una comida que no les gusta, que ya no quieren ni ir a clase, «ya que asocian una cosa con la otra», lamenta una de las madres.

Toñi Carpena asegura que su hijo no prueba bocado, y lo que es peor, en casa tampoco come. «La educadora les ofrece la comida a los niños pero no les fuerza. Ella misma asegura que los platos están incomestibles», sostiene.

Como ya informó La Opinión de Málaga, la guardería es municipal y está conveniada con la Junta de Andalucía. Hace menos de un mes tuvo que cambiar la empresa que servía los menús porque la sociedad cerró. Serunión ganó el concurso, con un servicio de dos meses, hasta Navidad, y desde entonces los niños han notado un cambio drástico en la alimentación, según explican los padres.

Carpena señala que su hijo es sólo uno de los cien afectados. Hay padres que incluso han dejado de llevarlos a la guardería, manteniendo la plaza, y durante este tiempo están pagando otra privada donde llevan a sus hijos, hasta que acabe el contrato con Serunión.

«La empresa está dispuesta a empezar a hacer menús similares a los que los niños comían antes, pero el problema también está en el sistema de línea fría. La comida de toda la semana llega los martes y los viernes y no lo entendemos», asegura esta madre, que tampoco comprende cómo el centro no utiliza la cocina que dispone en sus instalaciones. «Sólo habría que instalar un extractor».