El servicio de transporte público urbano de Rincón de la Victoria recupera desde este lunes, coincidiendo con el inicio de la fase 3 del plan de desescalada, en un 70 por ciento la frecuencia de sus líneas.

El concejal de Movilidad y Transporte del Ayuntamiento de Rincón de la Victoria, Antonio Fernández, ha informado de que ya se han restablecido al cien por cien las líneas 1 y 2, que hasta el momento operaban con restricciones horarias como consecuencia del confinamiento por el COVID-19.

En este sentido, el edil ha asegurado que de forma gradual se está procediendo al restablecimiento del transporte público "garantizando todas las medidas de seguridad teniendo en cuenta el aumento en la ocupación".

El alcalde de Rincón de la Victoria, Francisco Salado, ha destacado "el enorme esfuerzo que se viene realizando para garantizar la continuidad del servicio con todas las medidas, tanto para trabajadores como usuarios del transporte público". Además, ha agradecido a la empresa que gestiona el servicio, Rincónbus, "el importante trabajo que está realizando para restablecer la normalidad y la confianza de los usuarios del servicio".

Durante las últimas semanas se ha experimentado un aumento en un 30 por ciento del número de usuarios del transporte público urbano. "El objetivo es alcanzar prácticamente la normalidad en las próximas semanas", indica Fernández.

Las frecuencias de las líneas 1 y 2 ya operan en su horario habitual, desde las 07.00 horas con salida de Benagalbón hasta las 22.00 horas de lunes a domingo (L1), y desde las 07.30 horas desde La Cala del Moral hasta las 21.30 horas de lunes a viernes (L2). Las líneas 3 y 4 mantienen su frecuencia como en la Fase 2 de la desescalada, de lunes a viernes de 07.30 a 15.30 horas de lunes a viernes, y las líneas 5, 6 y 8 continúan sin servicio.

Por otro lado, se mantienen las medidas de higiene y seguridad de acuerdo con las recomendaciones que establece las autoridades sanitarias como el distanciamiento social, uso obligatorio de la mascarilla, limpieza y desinfección diaria de los vehículos que tras finalizar el trayecto se someten a una desinfección mediante pulverización con un higienizante de superficie, así como la limpieza manual de barandillas, asientos y respaldos.