Los vecinos de Mijas Pueblo cambiarán próximamente de hábitos a la hora de hacer algo tan cotidiano como tirar la basura. El Ayuntamiento de la localidad ha creado dieciocho puntos de concentración para tirar los desechos de la casa en la vía pública y acabar con el proceso actual, esto es, puerta por puerta.

Hasta ahora, los mijeños residentes en este núcleo urbano de la localidad costasoleña sólo tenían que salir a la puerta de su casa para dejar los residuos generados durante el día. El equipo de gobierno, con un objetivo doble, de limpieza e imagen, ha resuelto que a partir del próximo lunes, 19 de marzo, esta práctica estará prohibida.

«Sabemos que es una incomodidad para muchos vecinos, pero la medida es necesaria. Se trata de dar un paso de calidad y cuidar la higiene y salubridad de Mijas Pueblo, así como la imagen del núcleo, uno de nuestros principales atractivos turísticos», señaló la concejala de Residuos Sólidos y de Medio Ambiente, Carmen Márquez.

De esta manera, a partir de las ocho de la tarde del próximo lunes, los mijeños que residan en esta parte del municipio deberán llevar su basura hasta uno de los puntos que dispondrán de un contenedor, o en su defecto, de una aspa pintada en el suelo donde tendrán que depositar sus restos.

En este sentido, el concejal de Vía Pública en el Consistorio mijeño, Juan Carlos González, destacó que la nueva medida podría suponer un ahorro de hasta tres horas y media de trabajo por parte de los operarios de limpieza municipales.

Menos tiempo. «Actualmente, los trabajadores del servicio de recogida de basura emplean en torno a cinco horas para hacerse con toda la basura, yendo puerta por puerta. Con lo que proponemos ahora, estimamos que el mismo recorrido se puede hacer en apenas hora y media», reconoció el edil.

El edil señaló, además, que esto producirá una mejora en la calidad de vida de los vecinos de Mijas Pueblo, «no sólo por los olores, sino por el descanso porque los camiones estarán menos tiempo por las calles».

En cuanto a los puntos de depósito y recogida, los responsables del gobierno local expresaron que podrían cambiarse «por consenso vecinal». De tal manera que se irán ubicando según las molestias que planteen.

Por otra parte, los responsables gubernamentales mijeños quisieron hacer hincapié en la necesidad de separar los residuos para su reciclaje. Estiman el ahorro, si se hace correctamente, en hasta dos millones de euros de la diferencia que el Consistorio paga por el servicio de recogida y lo que ingresa por tasa de basura.