Reproches y abucheos fueron ayer los protagonistas de la moción de censura en Benalmádena, con la que el PP y UCB arrebataron la alcaldía a Javier Carnero (PSOE) para sentar en el sillón del gobierno a la número dos de los populares en la localidad, Paloma García Gálvez, que se convierte así en la primer alcaldesa del municipio después de que el partido haya prescindido del actual líder, Enrique Moya. De primer teniente de alcalde estará el líder de UCB, Francisco Salido, sentado a la derecha de Gálvez en el pleno extraordinario de ayer, donde una vez más se dificultó el trabajo de los medios de comunicación tras no dejarles permanecer en la sala por no haber el suficiente espacio y después de que los «palmeros» de partidos como UCB ocuparan las butacas destinadas a ellos.

Así, el pleno fue trascurriendo entre guiones ya repetidos en varias ocasiones por el PP y UCB, los reproches entre los partidos y los abucheos a Salido de los vecinos del municipio que impedían el normal transcurso de la sesión. Comenzó el turno de intervenciones la nueva regidora, refiriéndose a la mayoría obtenida en las pasadas elecciones municipales, pero sin llegar a gobernar ya que «la ley permite la celebración de pactos y unión de partidos». «Tras un año de desgobierno y apelando al mismo sistema jurídico, tenemos hoy la legitimidad de realizar este acuerdo de gobierno en el que confiamos y con el que vamos a trabajar por el bien de los benalmadenses», prosiguió la nueva regidora.«Se trata de una acción constructiva que lo que pretende es cumplir con el programa del partido que fue más votado en las elecciones», añadió.

Finalmente, manifestó que «se trata de trabajar con seriedad, rigor y coherencia, buscando por encima de todo que nuestro Ayuntamiento recobre la normalidad, que funcione, trabaje y colabore con cada ciudadano de Benalmádena a su desarrollo económico, social y personal. Y para alcanzar este objetivo, tengo que comenzar por ofreceros plena y total transparencia. Me empeñaré en que este nuevo equipo de gobierno que hoy proponemos exprese siempre la verdad, la realidad de la situación. Y cuando ésta sea difícil, que sea capaz de explicar y argumentar nuestras decisiones».

El discurso del Puerto

Por su parte, Francisco Salido volvió a basar su discurso en que la ruptura del pacto que su partido tenía con PSOE e IU se debía al incumplimiento de las promesas de sus anteriores socios de gobierno «por arriesgar los más de dos mil puestos de trabajo que generará la ampliación del Puerto Deportivo». «Los concejales de UCB no podíamos continuar al lado de un gobierno cuya gestión se basaba en la dejadez y en la desidia, y en el que Carnero ha engañado al pueblo porque se comprometió a impulsar la ampliación del Puerto y lo único que ha hecho ha sido paralizar el proyecto para contentar a su socio de IU, quien siempre se ha opuesto radicalmente a la ampliación», insistió Salido, mientras en la puerta del Ayuntamiento se escuchaba a multitud de vecinos gritando: «!Bien pagao¡»

La intervención más dura del nuevo equipo de Gobierno la protagonizó la edil del PP Concha Cifrián al dirigirse a Carnero: «Este voto de censura nunca tenía que haberse producido, porque usted nunca tenía que haber sido alcalde, porque no ha estado a la altura de las circunstancias. Ni usted ni sus socios de IU han dedicado a Benalmádena el tiempo ni el esfuerzo requerido ante la precaria situación en la que se encuentra».

«El riego de los primos» y «el dedo de Yahvé»

El líder del PSOE de Benalmádena, Javier Carnero, que también estuvo respaldado por parte de la ejecutiva malagueña, con Miguel Ángel Heredia a la cabeza, aprovechó su intervención para reiterar que detrás de esta moción se encuentra «el ansia de poder y los intereses personales y partidistas» del PP. El exalcalde, que ha vivido se segunda moción de censura en sólo tres años, calificó esta situación de «vergonzosa» y recriminó a la nueva alcaldesa que lo haya logrado sin someterse al voto del pueblo, ya que no encabezaba la lista en las pasadas elecciones municipales. «Debe agradecérselo a Enrique Moya y al dedo divino de Yahvé», dijo Carnero, refiriéndose al líder del PP malagueño, Elías Bendodo.

Por su parte, el edil del PSOE Manuel Arroyo arremetió contra Salido asegurando que «el político que carece de palabra no tiene derecho de mantenerse en su puesto», a la vez que también recordó al edil de UCB Juan Olea que tiempo atrás criticara «la demagogia de PP en las mociones de censura» para ahora pactar con ellos y realizar una. Así, en cuanto a Salido, echó en cara que hace tres años «pidiera perdón por la traición de su prima», María del Carmen Romero, que rompió el pacto que tenía con el PSOE para aliarse con el PP y propiciar la moción de censura de 2009. «En Benalmádena ahora no se habla de la prima de riesgo, sino del riesgo de los primos», ironizó Arroyo. Finalmente, le aconsejó que «deje de hacer demagogia con el Puerto», ya que él es el consejero delegado del mismo.