El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Benalmádena acaba de aprobar la adjudicación del contrato menor que permitirá a una empresa externa especializada estudiar el tráfico y la movilidad en una de sus principales arterias urbanas, la céntrica avenida Antonio Machado de Benalmádena Costa.

«Se trata de un estudio previo, encargado a una empresa externa, previo a la redacción del proyecto de reordenación de la avenida Antonio Machado vinculada a la EDUSI 'Benalmádena 2025. La costa es salud'», manifestó ayer el concejal delegado de Medio Ambiente, Joaquín Villazón (PSOE).

Dicha estrategia parte de la reciente aprobación por parte de la UE de una partida de 10 millones de euros, procedentes de los fondos FEDER, para el inicio de su implantación, junto a 2,5 millones de euros aportados desde el mismo Ayuntamiento. Entre las medidas que se barajarán figura una posibilidad de reducir de cuatro a dos carriles las vías disponibles al tráfico rodado en esta avenida.

El estudio no obstante evaluará las alternativas posibles para la reducción del tráfico rodado en la principal avenida de Benalmádena Costa. «Reducir el tráfico se enmarca dentro del modelo urbano para Benalmádena Costa que hemos planteado en la EDUSI: ganar espacio para el peatón y rebajar también la emisión de CO2 a la atmósfera», añadió el alcalde, el socialista Víctor Navas.

Precisamente, dentro de las líneas de actuación de la estrategia se incluyen dos relacionadas con la materia de este estudio: impulso al Plan de movilidad y al transporte amable, y reducción de la congestión de tráfico y de la emisión de CO2 a la atmósfera. «Este estudio supone el primer paso para la puesta en marcha de una estrategia de reducción del tráfico en Benalmádena Costa, conforme a un Plan de Movilidad Urbana Sostenible: la idea es convertir esta antigua carretera nacional en una vía urbana en pleno centro de Benalmádena Costa, en el corazón de su principal escaparate turístico y motor de su economía», expresó también Navas.

La empresa especializada determinará la viabilidad de reducir los cuatro carriles de circulación a tres o incluso hasta dos; y también si se contempla como «más viable» qué preferencia será óptima, la del sentido de circulación a Fuengirola o a Torremolinos.