Torremolinos desbloquea la parcela del que iba a ser su primer cinco estrellas después de 16 años

El Ayuntamiento de Torremolinos ha aprobado un convenio urbanístico que permite desbloquear la situación del enorme solar ubicado en el 109 de la avenida Carlota Alessandri, una de las principales de la ciudad, que desde hace 16 años se encontraba abandonada tras la paralización de las obras del que iba a ser el primer hotel de cinco estrellas de la ciudad y que nunca llegó a construirse.

La concejala de Regeneración Urbana de Torremolinos, Marina Vázquez, ha explicado durante el pleno celebrado esta mañana en el Ayuntamiento de Torremolinos que la Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (LISTA) ha permitido tramitar el cambio de uso del suelo, pasando de hotelero a residencial.

De esta manera, el actual propietario de la parcela va a poder destinar el terreno a la construcción de viviendas, aunque todavía no ha presentado el correspondiente proyecto para la solicitud de la licencia de obras, según informan fuentes municipales.

La concejala Marina Vázquez ha añadido que el convenio supondrá además una importante compensación económica para el Ayuntamiento de Torremolinos, ya que recibirá el 15% del aprovechamiento urbanístico que se genere por parte del promotor del proyecto residencial, cinco puntos por encima del mínimo que exige la ley.

El Cruiser Tres Carabelas

La empresa Arco Sur presentó el hotel Cruiser Tres Carabelas por todo lo alto en un evento celebrado en el Palacio de Congresos de Torremolinos, allá por el año 2006. El hotel se iba a construir en la parcela del antiguo hotel Tres Carabelas (luego Meliá Torremolinos), construido por el arquitecto Antonio Lamela y situado en la principal avenida de la ciudad, que fue derribado para dar paso a otro de categoría superior con la pretensión de convertirse en un referente que marcaría un antes y un después en el desarrollo turístico del municipio.

El proyecto contemplaba la construcción de dos edificios rectangulares de 12 y 13 plantas unidos por otro inmueble circular de 15 plantas. El complejo sumaría 469 habitaciones (150 de ellas suites) con capacidad para 1.300 huéspedes, contaría con todo tipo de servicios, galerías comerciales, spa y helipuerto.

El hotel iba a suponer una inversión de 120 millones de euros y la creación de 220 puestos de trabajo al margen de los que se empleasen durante las obras de construcción, y su apertura estaba prevista para el año 2010.

El naufragio

La primera piedra se puso el 8 de agosto de 2007 con bombo y platillo. Sin embargo, unos meses después, la Junta de Andalucía impugnó la licencia de obras concedida por el Ayuntamiento al entender que el establecimiento no se ajustaba al PGOU. La cuestión se solventó, pero la crisis económica de aquellos años torpedeó la línea financiera del proyecto y las obras se paralizaron a finales de 2008.

Agobiada por los problemas financieros, el 17 de julio de 2012, la empresa Arco Sur entró en concurso necesario tras arrastrar una deuda de varios millones de euros. El proyecto se hundía.

Desde entonces, 16 años después, la parcela que linda con el centro de salud de La Carihuela sigue vallada y en su interior solo están los cimientos y los muros de contención que reflejan una herida urbanística a cielo abierto que ahora va a poder cicatrizar.