La vigésimo novena edición del Festival de Teatro de Málaga echó el telón el pasado sábado. La gran cita municipal con las artes escénicas convocó a un total de 12.143 espectadores en las 28 funciones de los 13 espectáculos programados, lo que supone una pérdida de público de 8.716 personas respecto al año anterior, cuando el festival batió su récord histórico con una asistencia de 20.859 personas.

En 2011 se puso en cartel el mismo número de montajes, un total de 13, aunque las funciones fueron más numerosas (39) y se contó con compañías de gran tirón de público (Tricicle, Joglars, Fura dels Baus...). Este último dato de asistencia del Festival de Teatro supone el más bajo de los celebrados bajo las órdenes de la nueva directora del Cervantes, Charo Ema Bastardín, ya que su primer certamen, en 2009, contabilizó 15.793 espectadores. En años sucesivos se marcó una línea ascendente de público, que pasó de los 17.278 espectadores en 2010 a los ya citados 20.859 del pasado año.

Según la nota remitida desde el Teatro Cervantes, el XXIX Festival de Teatro de Málaga registró una notable tasa de asistencia de espectadores. Como media se ocuparon más del 70 por ciento (exactamente el 70,8%) de las butacas puestas a disposición del público, una cifra algo superior en los espectáculos del escenario principal (72%) que en los ofrecidos en el Teatro Echegaray (65,2%). Así, las dos representaciones de La Celestina, dos de los tres pases del circo Balagan y el último del monólogo de El Brujo, Mujeres de Shakespeare, lograron agotar las localidades en el Teatro Cervantes, mientras que mientras que en el Echegaray se vendieron todas las entradas de los dos pases de El collar de la paloma. De los más de 12.000 espectadores, 10.187 asistieron a las obras llevadas al primer escenario y 1.956 en las que se vieron en la segunda sala.

También consiguieron una alta ocupación las puestas en escena del Macbeth de Ur Teatro (más de un 75%) y el resto de las funciones del circo Balagan y Mujeres de Shakespeare. En el Teatro Echegaray rozó el lleno el estreno de El suicidio del ángel, de Mu Teatro, y tuvieron muy buena acogida del público las puestas en escena del estreno de Crack! La rebelión de las lágrimas, de LaMordiente Teatro, y André y Dorine, de Kulunka Teatro.

Al número de espectadores que acudieron a las funciones programadas en sala hay que añadir los datos de las personas que disfrutaron de las actividades paralelas. El pasacalles de Teatro del Lazzi por el Centro Histórico fue visto por cerca de 500 personas, mientras que a las tres sesiones del programa A telón cerrado asistieron más de 500 espectadores en total.